Y ello, tras asumir una carga extraordinaria de 10.400 millones de dólares (7.480 millones de euros) relacionada con el negocio de tarjetas debido a la entrada en vigor de la nueva normativa financiera en EEUU.
Asimismo, sin tener en cuenta el pago de dividendos a las acciones preferentes, las pérdidas de Bank of America sumaron 7.299 millones de dólares (5.251 millones de euros).
La entidad de Carolina del Norte justificó sus pérdidas por el impacto de 10.400 millones de dólares debido al deterioro del valor aplicable al segmento de servicios globales de tarjetas como consecuencia de los límites impuestos en las comisiones de intercambio de débito bajo la reforma del sistema financiero promulgada el pasado mes de julio, que reducirá los ingresos futuros del negocio de servicios globales de tarjetas.
Asimismo, las cuentas de Bank of America, cuya cifra de negocio alcanzó los 26.700 millones de dólares (19.204 millones de euros), un 2,5% más, reflejan el impacto de 5.396 millones de dólares (3.883 millones de euros) por las provisiones por pérdidas de crédito, la mitad que hace un año.
De este modo, en los nueve primeros meses del ejercicio, Bank of America registró pérdidas de 2.030 millones de dólares (1.460 millones de euros), frente al beneficio de 2.992 millones de dólares (2.152 millones de euros) del mismo periodo de 2009. No obstante, sin contabilizar el pago de dividendos, las pérdidas alcanzaron los 994 millones de dólares (715 millones de euros).
La cifra de negocio del banco ascendió a 87.822 millones de dólares (63.222 millones de euros), un 7,1% menos, mientras las provisiones por pérdidas de crédito bajaron un 39,4%, hasta 23.306 millones de dólares (16.763 millones de euros).