LD (Europa Press) El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) no acudirá a la reunión prevista con la dirección de Iberia para continuar con las negociaciones sobre el convenio colectivo de los pilotos, algo que ha provocado una presunta huelga de celo, según la compañía, porque los representantes de la sección sindical de la aerolínea "tienen que volar", según explicó uno de sus portavoces.
El representante de los pilotos precisó que la dirección de Iberia "sabía desde la semana pasada que los jefes sindicales volaban" porque no pudieron cambiar sus turnos para acudir a la reunión al tratarse de fechas sensibles que los pilotos "sortean", por lo que ningún compañero podía cambiarles estos servicios.
Asimismo, Sepla explicó que planteó "otras fechas a la dirección de Iberia", lo que, a su juicio, pone de manifiesto que "no hay una huelga de celo" porque los propios representantes sindicales "están trabajando" y son los que deberían haber convocado el supuesto paro.
En este sentido, el portavoz apuntó que el jefe de la sección sindical de Iberia, Justo Peral, tenía que cubrir una ruta hacia Guatemala, algo que sucede con otros representantes implicados en las negociaciones, que también tenían vuelos programados.
Iberia achaca el descenso de puntualidad y la cancelación de varios de sus vuelos en los últimos días a una huelga de celo del SEPLA, que a su vez rechaza estas acusaciones y alega la falta de 300 pilotos de cara al periodo navideño. La aerolínea también atribuye estas alteraciones al mal tiempo y otras serie de circunstancias.
En este sentido, la compañía ha anunciado la apertura de expedientes a los pilotos, a quienes amenazó con la adopción de las "medidas disciplinarias pertinentes", y ha exigido al sindicato la reparación del perjuicio económico ocasionado a la empresa.
Por su parte, el Sepla ha amenazado con tomar medidas legales contra Iberia debido a que la aerolínea estaría obligando a los pilotos a "vulnerar ciertas leyes de Aviación Civil" en temas referentes a equipajes, mercancías peligrosas o programación de vuelos.
A este respecto, el sindicato acusó a Iberia de estar programando "fuera de la ley", con horarios que obligan a los pilotos a volar más horas de las establecidas.
Iberia pide las actas de las Asambleas a la Audiencia Nacional
Iberia ha solicitado ante la Audiencia Nacional las actas de las Asambleas celebradas por el Sepla, el sindicato de pilotos, los pasados 4 y 12 de diciembre con el fin de probar que en ellas se acordaron medidas de presión ilícitas.
La petición de Iberia se refiere en concreto a los apartados relativos a 'Medidas a tomar', como prueba fehaciente de que el sindicato ha instado al colectivo a realizar medidas de presión que están detrás de las numerosas cancelaciones y retrasos en la mayoría de los vuelos.
Iberia entiende que dichos retrasos y cancelaciones se deben a una actuación concertada de los pilotos, promovida, inspirada y organizada por la sección sindical, con el objetivo de presionar en el marco del actual proceso negociador.
Las leyes españolas consideran "ilícitos o abusivos" los actos que supongan "una alteración colectiva del régimen de trabajo distinta de la huelga", como son los que están llevando a cabo los pilotos durante las últimas semanas, añade el citado comunicado.
Desde la fecha de las asambleas se han cancelado cerca de 400 vuelos y más de 4.000 han sufrido retrasos, y que han causado, según Iberia, considerables costes económicos, un daño irreparable a la imagen de la empresa y graves inconvenientes a los clientes.
La compañía ha rechazado de nuevo que necesite contratar más pilotos, como se defiende desde el Sepla. Añade que en la actualidad dispone de 13 pilotos por avión cuando hace dos años contaba con 11, y que la productividad se ha reducido un 1,4% el último año y un 8,1% el último mes, afirma la empresa.