LD (Europa Press) El entonces presidente y co-propietario de Domecq Importers y otros directivos de la compañía desviaron dinero de la empresa para incorporarlo a sus salarios, actividad que desarrollaron desde al menos 1989 hasta octubre de 1995. Michael Domecq reconoció en los tribunales que, junto a otros colaboradores, omitió información sobre ingresos a los Servicios Tributarios Internos norteamericanos (IRS), y también remitió documentos falsificados.
Sus colaboradores fueron el director financiero, Alfredo Valdés, el vicepresidente de Marketing, Gabriel Sagaz, y el vicepresidente de Ventas, Thomas Kaminsky, que anteriormente se declararon culpables de los cargos de conspiración.
Domecq, antiguo residente de Greenwich, en el estado de Connecticut, se trasladó a España en 1997, mientras la investigación sobre sus actividades ilícitas estaba en marcha, y fue arrestado y condenado en Reino Unido en 2006 por poseer un pasaporte español falso y obtener un carné de conducir británico de forma ilegal. El ex directivo fue extraditado a Estados Unidos este año.
Según el asistente del fiscal general encargado de la División Antimonopolio del Departamento de Justicia, Thomas O. Barnett, el reconocimiento de los cargos por parte de el acusado y la pena de diez años en prisión reflejan que el Departamento "perseguirá vigorosamente a los individuos que traten de violar la ley, sin importar sus intentos de escapar del sistema legal estadounidense".