LD (Europa Press) El banco ha subrayado que estas propiedades, con una superficie total de 300.000 metros cuadrados, se encuentran en su mayoría en el centro de ciudades pequeñas y medianas de toda Alemania y que, en su mayor parte, están ocupadas por oficinas de la entidad. El primer banco alemán explicó, asimismo, que seguirá ocupando la mayoría de estas propiedades a medio-largo plazo.
El responsable de inversiones corporativas de la entidad, Axel Wieandt, precisó que esta transacción se enmarca en la estrategia del banco de centrarse en sus negocios principales y optimizar más el uso de capital disponible. En noviembre de 2003, Deutsche Bank vendió numerosas propiedades en Alemania y Europa a través de una operación de cesión de arrendamiento por 1.000 millones de euros al fondo estadounidense Blackstone, y anunció su intención de reducir aún más su cartera inmobiliaria.
Esta tendencia es general en Alemania, donde numerosas grandes empresas han comenzado a reducir su exposición al mercado inmobiliario. ThyssenKrupp ha vendido recientemente activos inmobiliarios por 2.100 millones a un consorcio encabezado por el fondo inmobiliario de Morgan Stanley y el grupo alemán Corpus.