(Libertad Digital) En el caso de los Estados Unidos, si se suman las pensiones privadas, más el fondo de reservas para pensiones y los seguros de vida, la riqueza acumulada supone el 160 por ciento del PIB. Este país se suma a Holanda (124,9 por ciento), Islandia (123,2 por ciento) y Suiza (117,4) para formar el grupo de países en los que la riqueza acumulada en esta forma de ahorro supere la producción bruta anual. Finlandia y el Reino Unido apenas superan el 66 por ciento, y por encima del 50 están Australia, Irlanda y Canadá. Para el conjunto de la OCDE la media ponderada se sitúa en el 87,6 por ciento, muy lejos del 9,1 de España.
La crisis financiera de los años 2000 y 2001 supuso un duro golpe para los fondos privados de pensiones, que incluso en algunos países llegó a suponer una pérdida de valor, pero se ha recuperado con fuerza desde 2001 a 2005: a un ritmo medio del 8,7 por ciento al año.
El último informe de la OCDE muestra que "en algunos países, como el Reino Unido o los Estados Unidos, los planes de pensiones privadas (de empresa) comenzaron hace décadas, y, sin que sea ello una sorpresa, estos dos países tienen los mayores mercados de pensiones en valor absoluto". También se han acumulado grandes activos en otros países anglosajones, como Canadá y Australia, "y en algún otro país, como por ejemplo Japón, Holanda o Suiza". Pero "muchos países han seguido un modelo diferente, donde las pensiones públicas juegan un papel dominante en los sistemas de retiros para las personas de edad avanzada". Y cita a Francia, España, Grecia e Italia.
Los países de la Europa del Este están favoreciendo la introducción de sistemas de capitalización de pensiones, que crecen a gran velocidad. En la República Checa, Hungría y Polonia el capital acumulado ha crecido de 2001 a 2005 un 37,5, un 45,7 y un 54,5 por ciento, respectivamente.