LD (Europa Press) El ex consejero delegado de Merrill Lynch, John Thain, quien fue forzado a dimitir la semana pasada del cargo de responsable de banca global y de inversión de Bank of America después de que el mayor banco de EEUU adquiriera en enero el banco de inversión que había dirigido desde 2007, se mostró dispuesto a reembolsar los cerca de 1,2 millones de dólares gastados en reformar y decorar su despacho.
En una misiva enviada a los empleados de la entidad, Thain señala que esta cantidad, que fue gastada hace un año, no sólo se empleó en reformar su despacho en las oficinas de Merrill Lynch, sino también dos salas de conferencias y un área de recepción, aunque admitió que se trató de un "error" a la luz de la actual situación, por lo que se mostró dispuesto a reembolsar a la entidad los costes de la reforma.
Por otro lado, el ex consejero delegado de Merrill defendió su gestión al afirmar que la mayor parte de las colosales pérdidas sufridas por el banco de inversión en el cuarto trimestre, que superaron los 15.000 millones de dólares (11.419 millones de euros), según las previsiones de Bank of America, fueron en su mayor parte debidas a posiciones heredadas y a la evolución de los movimientos del mercado.
Admite que se trató de un "error"
"Hemos sido completamente transparentes con Bank of America. Conocían estas pérdidas, puesto que tenían acceso diario a nuestras cifras", dijo Thain. El pasado 22 de enero, Thain fue forzado a dimitir de sus responsabilidades en Bank of America (BofA) apenas tres semanas después de que la mayor entidad de EEUU completara la adquisición del Merrill Lynch, el banco de inversión dirigido por Thain desde 2007.
La entidad presidida por Kenneth Lewis anunció el nombramiento de Brian Moynihan como sustituto de Thain, quien dirigió el proceso de venta de Merrill Lynch a Bank of America, pero al que los malos resultados del banco de inversión terminaron por costarle el cargo que desempeñaba desde principios de año.
Bank of America informó de que Merrill Lynch podría perder 15.310 millones de dólares (11.520 millones de euros) en el cuarto trimestre, mientras que el mayor banco de EEUU registró pérdidas por un importe neto atribuido de 2.392 millones de dólares (1.800 millones de euros) en el mismo periodo, sus primeros números rojos en 17 años.