En septiembre de 2010, el Congreso aprobó una proposición no de ley en la que se instaba al Gobierno a suprimir la limitación de velocidad de 80 kilómetros por hora para conductores noveles. La propuesta había sido presentada por el PSOE.
Lo más llamativo, ahora que el Ejecutivo ha anunciado la reducción del límite de velocidad a 110 kilómetros por hora en autovías y autopistas, es la argumentación que expuso la diputada socialista Maritxell Cabezón para convencer a los parlamentarios de lo bueno de la medida sobre nuevos conductores.
Tras recordar que fue aprobado en 1974 en el marco de la crisis del petróleo y que en esa época el tráfico y los vehículos eran "muy distintos" a los actuales, apuntó que la limitación en autopistas y autovías "incide negativamente en la fluidez del tráfico, dificulta su gestión y puede llegar a suponer en determinadas circunstancias un peligro o riesgo para quien la practica".
La propuesta fue aprobada por unanimidad.