El pasado día 28 de mayo el Consejo de Gobierno de la junta de Andalucía aprobaba el Decreto-Ley 2/2010 de medidas urgentes sobre retribuciones en el sector público, publicado en el Boja de 1 de junio de 2010. La nota de prensa posterior indicaba que las medidas urgentes aprobadas supondrán un ahorro total aproximado de 861 millones de euros durante 2010 y 2011: 314 millones de euros en el presente ejercicio y 547 millones de euros a lo largo de 2011.
Sin embargo, las nóminas de los entes públicos ascienden a un total a 909 millones de euros durante el presente ejercicio de 2010, alrededor de 1.800 euros entre 2010 y 211. Es decir, el ahorro del gobierno de José Antonio Griñán no llega a la mitad del coste real de los salarios de la Administración Paralela organizada por el PSOE desde el gobierno.
Los datos del gasto de personal de estos entes empresariales los ofrece la propia Junta de Andalucía en los cuadros resumen del presupuesto 2010.
Sin embargo, hay que señalar que la información ofrecida por la junta de Andalucía en los presupuestos 2010 no es completa. Así, se escapan fundaciones creadas por las propias consejerías como Progreso y Salud, IAVANTE (Fundación para el Avance Tecnológico y el Entrenamiento Profesional)o la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía, que son fundaciones dependientes presupuestariamente de la Consejería de Salud, y que no ofrecen ningún tipo de datos reflejados en los Presupuestos de la Comunidad Autónoma de Andalucía para el 2010. ¿De dónde recibirán el dinero estos entes extra-presupuestarios?
De esta forma, los gastos de personal de los entes externos de la Junta de Andalucía más ajustados a la realidad los ofrece la propia Cámara de Cuentas de Andalucía para el 2008. En ellos se demuestra que hay un baile de gastos de personal externo no contabilizado en los presupuestos 2010 de algo más de 78 millones de euros respecto de 2008 (sin subida salarial).
Esta administración paralela está resultando un lastre letal para la economía de Andalucía. La duplicidad administrativa es una señal del gobierno del PSOE en Andalucía, y es, además, una administración que escapa, en demasiadas ocasiones, a los controles de la Intervención de la Junta de Andalucía.
A esto se añade el hecho dramático que el número de estos trabajadores, entre empresas públicas, agencias y fundaciones (25.980 contratados en 2008) superan al número de funcionarios de la propia Administración General de la Junta de Andalucía (24.777 a fecha 31 diciembre 2009), y que cada uno de ellos cuesta a los andaluces 4.015 euros más al año que un funcionario o un laboral, casi 86 millones de euros anuales.
Seguramente, el Gobierno de Griñán, más acostumbrado al derroche que al recorte, no acierta con las tijeras.
Fuente: Junta de Andalucía. Presupuesto 2010.
El recorte en Andalucía ni siquiera paga los sueldos de la administración paralela
Nuevo baile de cifras: el ahorro planificado por el gobierno de José Antonio Griñán para recortar las retribuciones del sector público no llega a la mitad del coste real de los salarios de la Administración paralela organizada por el PSOE desde el Gobierno.
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