El Tesoro Público ha colocado 2.245 millones de euros, cerca del rango más bajo de las previsiones de emisión, que eran de entre 2.000 y 3.000 millones, aunque los tipos marginales se han reducido prácticamente a la mitad respecto a la anterior subasta, según datos del organismo adscrito al Ministerio de Economía y Hacienda.
Pese a que el volumen adjudicado no ha alcanzado el máximo, la demanda ha sido amplia, con 5.175,05 millones de euros en el caso de las letras a tres meses y de 6.649,27 millones en el de las letras a seis meses.
Los mercados parecen haber dado una buena acogida al plan de recapitalización de las cajas presentado ayer por el Gobierno, en el que se estima que la necesidad de capital del sector financiero es de 20.000 millones de euros y se abre la puerta a que las entidades reciban aportaciones públicas a través del Frob.
Concretamente, el Tesoro ha adjudicado 945 millones de euros en letras a tres meses, con un tipo marginal del 0,995%, frente al 1,848 de la anterior subasta. La emisión de letras a seis meses se ha cerrado con la colocación de 1.300 millones de euros, con un 1,828% de rentabilidad, por debajo del 2,650% anterior.
Los mercados dan un nuevo respiro después de que las tensiones hayan amainado permitiendo que la prima de riesgo se sitúe en las últimas horas en torno a los 200 puntos básicos.
El Tesoro cumple sus objetivos
Hasta ahora, el Tesoro no ha dejado de cumplir sus objetivos, la última vez el pasado 18 de enero, cuando adjudicó 5.538,74 millones de euros en letras a 12 y 18 meses a tipos más reducidos que en las últimas subastas.
El organismo no tuvo problemas para captar liquidez de los mercados, a pesar de las dudas que aún se ciernen sobre la economía española, dado que las peticiones de los inversores se situaron en 13.947,56 millones de euros, casi el triple de lo adjudicado.