LD (EFE) El secretario general de la OMT, Francesco Frangialli, aseguró que España mantendrá el segundo puesto mundial, por detrás de Francia, pese a que el resultado de este año no será "excepcional", pero tampoco lo será para el país galo.
Frangialli desvinculó la desaceleración del turismo español de los atentados terroristas perpetrados en Madrid el 11 de marzo y apuntó a la debilidad económica de los principales mercados emisores de turismo hacia España y al crecimiento de los mercados emergentes, entre las causas más importantes.
A juicio del secretario general de la OMT, los atentados de Madrid no han tenido consecuencias significativas para el sector turístico español, mientras que Estados Unidos perdió, tras el 11-S, 15 millones de llegadas en dos años (2001-2003) que serán muy difíciles de recuperar.
En cuanto a los ingresos por turismo, España seguirá ocupando también el segundo puesto, tras Estados Unidos y por delante de Francia, que tiene unos ingresos similares a los de España, por lo que no podrá de momento superarla. Sin embargo, pese a la caída del número de turistas sufrida por Estados Unidos tras el 11-S, el gasto medio por turista "está muy por encima de la media mundial y europea", gracias, en parte, a una mayor estancia media de los turistas que visitan el país.
La OMT considera que España "no va a crecer mucho", pero tampoco lo harán Francia e Italia, ya que con estas cifras, dijo Frangialli, se puede subir como máximo un 4 por ciento, pero es muy difícil alcanzar un 10 por ciento. La idea ya no es que lleguen 5 millones de turistas más, sino "cómo gestionar ese turismo para que genere más ingresos, más renta y mejor calidad de vida para todo el mundo" y que sea aprovechado por la economía y la sociedad, añadió.
Frangialli desvinculó la desaceleración del turismo español de los atentados terroristas perpetrados en Madrid el 11 de marzo y apuntó a la debilidad económica de los principales mercados emisores de turismo hacia España y al crecimiento de los mercados emergentes, entre las causas más importantes.
A juicio del secretario general de la OMT, los atentados de Madrid no han tenido consecuencias significativas para el sector turístico español, mientras que Estados Unidos perdió, tras el 11-S, 15 millones de llegadas en dos años (2001-2003) que serán muy difíciles de recuperar.
En cuanto a los ingresos por turismo, España seguirá ocupando también el segundo puesto, tras Estados Unidos y por delante de Francia, que tiene unos ingresos similares a los de España, por lo que no podrá de momento superarla. Sin embargo, pese a la caída del número de turistas sufrida por Estados Unidos tras el 11-S, el gasto medio por turista "está muy por encima de la media mundial y europea", gracias, en parte, a una mayor estancia media de los turistas que visitan el país.
La OMT considera que España "no va a crecer mucho", pero tampoco lo harán Francia e Italia, ya que con estas cifras, dijo Frangialli, se puede subir como máximo un 4 por ciento, pero es muy difícil alcanzar un 10 por ciento. La idea ya no es que lleguen 5 millones de turistas más, sino "cómo gestionar ese turismo para que genere más ingresos, más renta y mejor calidad de vida para todo el mundo" y que sea aprovechado por la economía y la sociedad, añadió.