LD (EFE) Según ha comunicado Gas Natural a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), estos 3.098 millones corresponden a las inversiones que ambas compañías deberían realizar en los sectores regulados entre los años 2003 y 2006, de los que 1.588 millones se destinarían a distribución de electricidad y otros 1.510 millones a distribución gasista. Además, Gas Natural asegura que "las desinversiones presentadas al Servicio de Defensa de la Competencia no tendrán impacto en las actividades reguladas, ya que las enajenaciones propuestas se realizarán con todos los requisitos legales y técnicos".
Este comunicado a la CNMV se produce justo cuando la CNE está ultimando el informe que analiza si la solvencia financiera de la empresa resultante de la OPA es suficiente para afrontar las inversiones comprometidas por las compañías implicadas en sectores regulados, como la distribución y el transporte eléctrico o el almacenamiento y el transporte gasístico. Esta información de Gas Natural pretende demostrar que, en caso de triunfar la OPA, la operación no amenazaría las inversiones previstas en estos sectores regulados, que de hecho no han sido revisadas para buscar ahorros con motivo de la fusión, sino que se asumen íntegramente las que tenían por separado Iberdrola y Gas Natural.
Gas Natural destaca además que "la generación de fondos prevista para el grupo consolidado en el período 2003-2006 permite cubrir 5,6 veces las inversiones comprometidas por las dos compañías en actividades reguladas". Incluso, si la CNE lo considera necesario, Gas Natural se muestra dispuesta a avalar las inversiones previstas para los sectores regulados, los 3.098 millones de euros, algo totalmente inusual en el sector energético.
Gas Natural también trata otro de los aspectos que preocupan a la CNE, como es que los niveles de endeudamiento del grupo resultante puedan amenazar el futuro de las inversiones en los sectores regulados. En este sentido, la empresa gasista advierte de que, tras la OPA, el ratio de endeudamiento de la sociedad resultante se situaría entre el 63% y el 67% del total de fondos propios, pero asegura que en 6 meses este ratio se reduciría a una horquilla entre el 59% y el 64% cuando se ejecute el plan de desinversiones previsto.
Gas Natural recuerda a la CNE que en el año 2000 se pronunció favorablemente respecto a la OPA de Unión Fenosa sobre Hidrocantábrico, cuando la misma arrojaba unos niveles de deuda sobre recursos propios del 68%, por encima de los que tendría la OPA sobre Iberdrola.
Este comunicado a la CNMV se produce justo cuando la CNE está ultimando el informe que analiza si la solvencia financiera de la empresa resultante de la OPA es suficiente para afrontar las inversiones comprometidas por las compañías implicadas en sectores regulados, como la distribución y el transporte eléctrico o el almacenamiento y el transporte gasístico. Esta información de Gas Natural pretende demostrar que, en caso de triunfar la OPA, la operación no amenazaría las inversiones previstas en estos sectores regulados, que de hecho no han sido revisadas para buscar ahorros con motivo de la fusión, sino que se asumen íntegramente las que tenían por separado Iberdrola y Gas Natural.
Gas Natural destaca además que "la generación de fondos prevista para el grupo consolidado en el período 2003-2006 permite cubrir 5,6 veces las inversiones comprometidas por las dos compañías en actividades reguladas". Incluso, si la CNE lo considera necesario, Gas Natural se muestra dispuesta a avalar las inversiones previstas para los sectores regulados, los 3.098 millones de euros, algo totalmente inusual en el sector energético.
Gas Natural también trata otro de los aspectos que preocupan a la CNE, como es que los niveles de endeudamiento del grupo resultante puedan amenazar el futuro de las inversiones en los sectores regulados. En este sentido, la empresa gasista advierte de que, tras la OPA, el ratio de endeudamiento de la sociedad resultante se situaría entre el 63% y el 67% del total de fondos propios, pero asegura que en 6 meses este ratio se reduciría a una horquilla entre el 59% y el 64% cuando se ejecute el plan de desinversiones previsto.
Gas Natural recuerda a la CNE que en el año 2000 se pronunció favorablemente respecto a la OPA de Unión Fenosa sobre Hidrocantábrico, cuando la misma arrojaba unos niveles de deuda sobre recursos propios del 68%, por encima de los que tendría la OPA sobre Iberdrola.