(Libertad Digital) Desde la Asociación Madrileña de Consumidores y Contribuyentes se critica el "cada vez mayor intervencionismo en el comercio minorista por parte de los poderes públicos. Intervencionismo que se puede resumir en menores opciones para el consumidor; se pretende, mediante limitaciones a los comercios, teledirigir al consumidor diciéndole dónde, cómo, cuándo y qué puede comprar protegiendo a empresarios ineficientes incapaces de ofrecer a los consumidores aquello que demandan, cuando lo demandan, como lo demandan y donde lo demandan".
Según el presidente de esta asociación, Javier Alonso Gutiérrez, "la limitación en las aperturas de nuevos establecimientos comerciales limita la competencia y provoca tanto subidas de precios como descensos en la calidad del servicio al proteger a los empresarios ya establecidos y entorpecer la llegada de comercios más baratos y con mejor servicio. También las tradicionales limitaciones en los horarios y calendarios de aperturas atentan directamente contra los derechos e intereses de los consumidores ya que de esta forma ven limitada la organización de su tiempo por culpa de horarios comerciales incompatibles con los modos de vida actuales".
Alonso Gutiérrez afirma que "la limitación de plazas de aparcamiento en los comercios o la referente a las marcas blancas representan una auténtica burla a los consumidores. ¿Insinúan acaso que debemos ir a hacer la compra en bicicleta?. Pero lo más grave es que las regulaciones no paran de crecer y por partida doble: cada vez más regulaciones y cada vez sobre mayor número de comercios. En definitiva, cada vez más trabas y molestias para el consumidor".