Salvador Santos Campano aprovechó esta ocasión para invitar a la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, “a colaborar estrechamente y de forma coordinada con la Comunidad de Madrid y con la Cámara de Comercio para que las empresas consideren la innovación como una ventaja indiscutible, aún en tiempos de crisis económica”.
En la imagen (de izquierda a derecha): Arturo Fernández, presidente de CEIM; Antonio Beteta, consejero de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid; Salvador Santos Campano, presidente de la Cámara de Comercio de Madrid, y José Ramón Sanz Pinedo, presidente de la Comisión de Innovación de la Cámara de Comercio de Madrid.
El documento que entregaron los presidentes de la Cámara de Comercio de Madrid y CEIM al consejero de Economía y Hacienda contiene las siguientes medidas de naturaleza tributaria relativas a la I+D+i:
1. Deducción total para actividades de investigación.
Los empresarios madrileños proponen recuperar, lo antes posible, el 100% de la deducción en el Impuesto de Sociedades por actividades de I+D+i, tal y como estaba establecido en la Ley que regula este impuesto hasta la modificación de la misma en 2006. La reforma que introdujo la Ley 35/2006, de 28 de noviembre, redujo el importe de la deducción hasta el 92% de la inversión para los períodos impositivos iniciados en 2007, que, desde 2008, se ha quedado en el 85% de las inversiones realizadas.
2. Mantener sin límites temporales las deducciones para I+D+i.
La Reforma del Impuesto de Sociedades en 2006 fijó para el ejercicio fiscal de 2012 el final de las actuales deducciones para las actividades de I+D+i. La fuerte contestación social que creó la desaparición de estos incentivos fiscales obligó al Gobierno a reconsiderarlas, después de que el Congreso de los Diputados aprobara por unanimidad una proposición para mantener las deducciones en el Impuesto de Sociedades.
Salvador Santos Campano afirmó que el anuncio que realizó el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, el pasado día 2, acerca de mantener “más allá de 2011” las deducciones del Impuesto de Sociedades a las actividades innovadores “es una buena noticia, aunque no tanto los datos sobre inversión empresarial en I+D+i a escala nacional que ahora están encima de la mesa, ya que sólo 3.200 empresas se benefician en España de la deducción que les ofrece el Impuesto de Sociedades, por un importe conjunto de 317 millones de euros”. El presidente de la Cámara de Comercio de Madrid precisó que esta cifra cabe corregirla ligeramente alza, “porque habrá sociedades que hayan tenido resultados negativos y, por lo tanto, no pudieran aplicarse la deducción que les permite el Impuesto”.
La Cámara de Comercio de Madrid y CEIM consideran, además, que la actual indefinición del Gobierno perjudica a proyectos que podrían no llegar a iniciarse ya en las fechas actuales. Igualmente, estiman que la eliminación de la deducción es contraria a la política aplicada por los países europeos más avanzados de nuestro entorno, lo que tendría graves consecuencias para nuestro tejido industrial, teniendo en cuenta la posición de España en el contexto internacional en cuanto a inversión por actividades de I+D+i en términos de PIB y, especialmente, en cuanto a inversión empresarial por actividades de I+D+i.
La Comunidad de Madrid lidera la inversión regional en I+D+i, actividades a las que destina cerca del 2% de su PIB entre la inversión pública y la privada, mientras que la media nacional se reduce al 1,27% del PIB.
Las empresas son las que dedican el principal esfuerzo en gasto en I+D+i en la Comunidad de Madrid, ya que acaparan el 59% de la inversión total, casi cuatro puntos por encima de la media nacional. Este hecho confirma la apuesta del Gobierno de Esperanza Aguirre por crear un entorno atractivo para que las empresas generen dicha inversión y se desarrollen los procesos.
3. Ampliar el ámbito de los incentivos fiscales.
La Cámara de Comercio de Madrid y CEIM proponen también que se incentiven fiscalmente las actividades innovadoras relacionadas con la mercadotecnia o la organización empresarial, que estiman necesarias para la adaptación de las empresas al nuevo escenario económico. Sugieren que estas actividades puedan estar gravadas con un tipo específico, igual o algo más reducido que el correspondiente a innovación, que era del 10% antes de la reducción aplicable en 2007 y años siguientes.
4. Deducir el coste del informe técnico para obtener ayudas.
En la actualidad, cualquier solicitud de ayudas fiscales por actividades de I+D+i debe dirigirse al Ministerio de Ciencia e Innovación acompañado de un informe técnico, que solo pueden emitir 10 entidades independientes acreditadas por la Entidad Nacional de Acreditación (ENAC). Al entender que este sobrecoste frena el acceso a las ventajas fiscales a la I+D+i, sobre todo para las pymes, las empresas madrileñas demandan que este gasto forme parte del propio proyecto y, por lo tanto, se incluya en la deducción fiscal por actividades de I+D+i.
5. Financiar a las pymes el coste del informe del Ministerio.
Para que una empresa pueda certificar que se dedica a actividades de I+D+i, y por lo tanto recibir ayudas del Ministerio de Ciencia e Innovación, necesita que el Gobierno central emita un informe que califique sus actividades, cuyo coste medio –que deben asumir las empresas– ronda los 3.000 euros.
La Cámara de Comercio de Madrid y CEIM afirman que este sobrecoste es muy elevado para una pyme y supone un obstáculo para el acceso a las ventajas fiscales de la I+D+i. Cabe recordar que más del 99% de las 500.000 empresas madrileñas son de pequeña y mediana dimensión.
Entre las propuestas que la Cámara de Comercio de Madrid y CEIM han elevado hoy al Gobierno regional se solicita a la Comunidad de Madrid que financie a las pymes el coste de este trámite o bien que intermedie en el proceso de negociación con el Ministerio de Ciencia e Innovación para que éste exonere de su pago por razón de la materia o del presupuesto del proyecto.
6. Compatibilizar la bonificación a la Seguridad Social de los investigadores con otras ayudas fiscales.
Según la Ley 25/2006, la bonificación de las cuotas de la Seguridad Social para el personal investigador (que equivalen al 40% de las cotizaciones por contingencias comunes a cargo del empresario) son incompatibles con otro tipo de ayudas por actividades de investigación en el Impuesto de Sociedades.
La Cámara de Comercio de Madrid y CEIM entienden que las empresas innovadoras tienes que asumir importantes costes laborales que pueden desincentivar la contratación de personal investigador cualificado. Por ello, abogan por eliminar la incompatibilidad de los incentivos por I+D+i y las bonificaciones a las cotizaciones de investigadores o bien que las ayudas fiscales tengan un porcentaje inferior.
Salvador Santos Campano concluyó que “todos tenemos que tener claro que no es posible mantener un tejido productivo competitivo en una economía globalizada si éste no avanza, innova y desarrolla nuevas y más eficaces soluciones de consumo”.