Según indicaron fuentes empresariales Díaz Ferrán se reunió este martes con los vicepresidentes de la CEOE (un total de 21) y pidió autorización para firmar un acuerdo con los sindicatos, petición que le fue denegada.
De hecho, el presidente de la Comisión de Relaciones Laborales, Santiago Herrero, pidió que se celebre una Junta Directiva el próximo lunes para abordar este tema, pero Díaz Ferrán rechazó la propuesta.
Lo que sí parece claro es que se celebrará una Junta para determinar la postura final de la patronal, aunque, de momento, no hay una fecha concreta para su celebración.
Desde el servicio de comunicación CEOE, señalaron no tener constancia de esto y explicaron que al encuentro han acudido 17 de los 21 vicepresidentes y que todos han ofrecido un respaldo unánime y expreso a Díaz Ferrán para que continúe con las negociaciones.
Tampoco confirmaron si se celebrará o no una Junta la semana que viene, pero aseguraron que todos los presentes en el encuentro ratificaron las propuestas que la CEOE ha llevado a la mesa de negociación y coincidieron en la necesidad de cerrar la reforma laboral a finales de mayo con o sin acuerdo.
En el encuentro sólo se ha tratado la reforma laboral y no la posible destitución de Díaz Ferrán como patrón de patronos, aunque una hora antes el presidente de Confemental, Carlos Pérez de Bricio y con el vicepresidente de la organización, Javier Ferrer, pidieron a Díaz Ferrán su que abandonara su cargo.
¿Huelga general?
Con el encuentro de este martes, las negociaciones para avanzar en un acuerdo sobre la reforma laboral y evitar un nuevo decreto del Gobierno se complican a seis días para que expire el plazo fijado por el Ejecutivo.
Gobierno, sindicatos y patronal llevan negociando casi dos años esta reforma, que puede acabar en una huelga general si no cuenta con el visto bueno de los sindicatos.
Tanto CC.OO. como UGT han amenazado en varias ocasiones con salir a la calle ante el 'tijeretazo' que se le ha dado al gasto social para acelerar la reducción del déficit y cumplir con las exigencias de Bruselas.
La falta de acuerdo en esta reforma puede convertirse en el detonante que anime finalmente a los sindicatos a convocar una huelga que muchos plantean ya como una realidad.