LD (EFE) Las fuentes consultadas explicaron que la OPA de Gas Natural se ha tratado ya en varias reuniones del Consejo y que el proceso "va avanzando", aunque precisaron que aún no se puede anticipar cuándo estarán listos los dos informes preceptivos: sobre actividades reguladas y sobre competencia. De hecho, la CNE ha pedido información adicional tanto a Gas Natural como a Iberdrola y está recabando la opinión de otras empresas del sector energético.
La CNE debe pronunciarse respecto a dos aspectos de la OPA de Gas Natural sobre Iberdrola. Por un lado, tiene que analizar cómo afecta la operación a las actividades reguladas en los sectores eléctrico y gasista, y, por otro, su impacto sobre la competencia en los mercados, aspecto que también estudia el Servicio de Defensa de la Competencia, dependiente del Ministerio de Economía.
Las fuentes citadas restaron importancia a las eventuales diferencias entre los consejeros del organismo regulador y señalaron que "es lo normal en un órgano compuesto por nueve personas" (ocho consejeros y el presidente, Pedro Meroño). Según publica el diario Expansión, la Opa ha provocado una fuerte división en el seno de esta Comisión y considera que aún es pronto para pronosticar una postura del regulador.
El informe de la CNE es un paso más en la Opa de Gas Natural. Si supera este trámite aún tendrá que afrontar las pesquisas de las autoridades de la Competencia y después tendrá que recibir el visto bueno de los accionistas de Iberdrola y de la propia Gas Natural. Según publicó el lunes el diario El País, Iberdrola se plantea presentar una demanda contra Gas Natural, aunque esta última afirma que esta actuación judicial sería de “dudosa legalidad”. Iberdrola no ha confirmado ni desmentido esta posibilidad.
Entretanto, y según afirma el diario El Mundo, UNESA, la patronal que agrupa a todas las eléctricas españolas, habría pedido al Gobierno que vete los derechos políticos de La Caixa en el nuevo grupo que generaría la fusión de Iberdrola y Gas Natural. En el informe remitido a la CNMV, la institución recuerda que la caja “debe considerarse como una entidad de naturaleza pública” y, según la legislación vigente, no puede ejecutar decisiones en el consejo de administración de una compañía energética.
La CNE debe pronunciarse respecto a dos aspectos de la OPA de Gas Natural sobre Iberdrola. Por un lado, tiene que analizar cómo afecta la operación a las actividades reguladas en los sectores eléctrico y gasista, y, por otro, su impacto sobre la competencia en los mercados, aspecto que también estudia el Servicio de Defensa de la Competencia, dependiente del Ministerio de Economía.
Las fuentes citadas restaron importancia a las eventuales diferencias entre los consejeros del organismo regulador y señalaron que "es lo normal en un órgano compuesto por nueve personas" (ocho consejeros y el presidente, Pedro Meroño). Según publica el diario Expansión, la Opa ha provocado una fuerte división en el seno de esta Comisión y considera que aún es pronto para pronosticar una postura del regulador.
El informe de la CNE es un paso más en la Opa de Gas Natural. Si supera este trámite aún tendrá que afrontar las pesquisas de las autoridades de la Competencia y después tendrá que recibir el visto bueno de los accionistas de Iberdrola y de la propia Gas Natural. Según publicó el lunes el diario El País, Iberdrola se plantea presentar una demanda contra Gas Natural, aunque esta última afirma que esta actuación judicial sería de “dudosa legalidad”. Iberdrola no ha confirmado ni desmentido esta posibilidad.
Entretanto, y según afirma el diario El Mundo, UNESA, la patronal que agrupa a todas las eléctricas españolas, habría pedido al Gobierno que vete los derechos políticos de La Caixa en el nuevo grupo que generaría la fusión de Iberdrola y Gas Natural. En el informe remitido a la CNMV, la institución recuerda que la caja “debe considerarse como una entidad de naturaleza pública” y, según la legislación vigente, no puede ejecutar decisiones en el consejo de administración de una compañía energética.