LD (EFE) En su revisión final de los resultados económicos del año pasado, el Gobierno estadounidense indicó que entre octubre y diciembre el PIB creció a un ritmo anual del 1,4 por ciento, después de experimentar un incremento del 4 por ciento en el tercer trimestre. La desaceleración del ritmo de crecimiento del PIB en el cuarto trimestre del año pasado reflejó, principalmente, un gasto más débil de los consumidores, la ampliación del déficit comercial del país y una acumulación más pausada de los inventarios.
El gasto de los consumidores -que equivale a dos tercios del PIB estadounidense- creció sólo un 1,7 por ciento en el último trimestre del año pasado, su crecimiento más lento desde los tres meses que siguieron a los atentados terroristas de septiembre de 2001, con lo que en todo el año experimentó un incremento del 3,1 por ciento.
El informe del gobierno agrega que las ventas finales de productos de fabricación nacional subieron un 1,1 por ciento en el último trimestre de 2002, lo que refleja una producción débil. Además, los beneficios empresariales después del pago de los impuestos, los beneficios empresariales bajaron hasta un 4 por ciento, en relación con el año anterior. La inversión empresarial subió un 2,3 por ciento entre octubre y diciembre -el primer incremento de las inversiones empresariales en nueve trimestres-, aunque en todo 2002 la inversión de las empresas bajó un 5,7 por ciento, la mayor caída desde 1975.
La revisión de las cifras trajo también un cálculo más alto de la inflación . El índice de precios en gastos de consumo personal -un indicador al que la Reserva Federal da más importancia que al índice de precios al consumo- subió a un ritmo anual del 1,8 por ciento entre octubre y diciembre. Si se excluyen los gastos en alimentos y energía, en los que los precios son más volátiles, el índice de precios en gastos de consumo personal aumentó un 1,5 por ciento en el último trimestre de 2002. El cálculo preliminar había sido del 1,3 por ciento.
La revisión de cifras también mostró un crecimiento menos robusto de los ingresos personales . El ingreso personal creció a un ritmo anual del 2,4 por ciento en el cuarto trimestre, en lugar del 2,7 por ciento calculado de forma preliminar hace un mes.
El gasto de los consumidores -que equivale a dos tercios del PIB estadounidense- creció sólo un 1,7 por ciento en el último trimestre del año pasado, su crecimiento más lento desde los tres meses que siguieron a los atentados terroristas de septiembre de 2001, con lo que en todo el año experimentó un incremento del 3,1 por ciento.
El informe del gobierno agrega que las ventas finales de productos de fabricación nacional subieron un 1,1 por ciento en el último trimestre de 2002, lo que refleja una producción débil. Además, los beneficios empresariales después del pago de los impuestos, los beneficios empresariales bajaron hasta un 4 por ciento, en relación con el año anterior. La inversión empresarial subió un 2,3 por ciento entre octubre y diciembre -el primer incremento de las inversiones empresariales en nueve trimestres-, aunque en todo 2002 la inversión de las empresas bajó un 5,7 por ciento, la mayor caída desde 1975.
La revisión de las cifras trajo también un cálculo más alto de la inflación . El índice de precios en gastos de consumo personal -un indicador al que la Reserva Federal da más importancia que al índice de precios al consumo- subió a un ritmo anual del 1,8 por ciento entre octubre y diciembre. Si se excluyen los gastos en alimentos y energía, en los que los precios son más volátiles, el índice de precios en gastos de consumo personal aumentó un 1,5 por ciento en el último trimestre de 2002. El cálculo preliminar había sido del 1,3 por ciento.
La revisión de cifras también mostró un crecimiento menos robusto de los ingresos personales . El ingreso personal creció a un ritmo anual del 2,4 por ciento en el cuarto trimestre, en lugar del 2,7 por ciento calculado de forma preliminar hace un mes.