La cifra de negocios de la industria desaceleró notablemente su crecimiento en el décimo mes del año, pues en septiembre repuntó un 4,8%, es decir, tres puntos más de lo que lo ha hecho en octubre.
En cuanto a las entradas de pedidos del sector, éstas subieron un 2,2% en octubre, casi 4,5 puntos por debajo de la que registraron en septiembre. Se trata también del décimo incremento interanual consecutivo que experimentan las entradas de pedidos. En los diez primeros meses del año, la facturación de la industria creció un 5,9% de media, en tanto que las entradas de pedidos repuntaron un 6,9%.
Bienes intermedios y energía impulsan la facturación
La cifra de negocios de la industria se vio impulsada en octubre por los bienes intermedios, que situaron su tasa anual en el 6,3%, gracias al incremento de la facturación en la mayoría de sus actividades, especialmente en la metalurgia (+17,3%) y en la industria química (+16,9%).
La facturación de la industria también se vio favorecida por la energía, con una tasa anual del 15,4%, debido fundamentalmente al aumento de coquerías y refino de petróleo, que experimentó un repunte del 16,7%. Por su parte, el sector de bienes de equipo experimentó una variación anual del -4,4%, motivada fundamentalmente por la evolución negativa en la fabricación de vehículos de motor (-4,8%).
Los pedidos también moderan su crecimiento
Por su parte, las entradas de pedidos del sector subieron un 2,2% en octubre, más de cuatro puntos por debajo de la observada en septiembre.
Los bienes intermedios y la energía fueron los que más contribuyeron al crecimiento positivo de los pedidos en el décimo mes del año. Los primeros experimentaron una tasa anual del 5,5%, motivada por el aumento de nuevos pedidos en la metalurgia (+16,5%) e industria química (+13%), mientras que la energía avanzó un 15% gracias al repunte en coquerías y refino de petróleo (+16,3%).
Por su parte, el sector de bienes de equipo influyó negativamente en el índice general, con una variación anual del -4,2%, motivada por la evolución desfavorable de casi todas las actividades del sector, especialmente de la fabricación de vehículos a motor (-4,1%).