La polémica intervención de la ministra de Economía, Elena Salgado, en el Senado ha dejado en evidencia el optimismo del Gobierno sobre la duración y gravedad de la crisis económica.
Pese a que, durante su comparecencia el jueves, Salgado evitó mostrar preocupación, el discurso oficial elaborado por su departamento fue meridianamente claro: "Aún quedan por delante momentos difíciles", especialmente en lo que afecta al desempleo y, por lo tanto, habrá que "afrontar retos exigentes".
Tras estas frases, el discurso señalaba que "no se puede descartar una recaída" de la actividad económica, aunque Salgado eludió pronunciar tales palabras arguyendo que se trataba de una "errata". De este modo, el discurso de la ministra desmonta el anuncio del Gobierno señalando que "lo peor de la crisis ya ha quedado atrás".
¿Pero en qué se basa el departamento de Salgado para no descartar una "recaída" de la crisis económica?
Los informes internos que maneja el Ministerio son claros a este respecto. Economía avanza una contracción del PIB del 4% durante los próximos meses, según el Indicador Sintético de Actividad que elaboran los técnicos.
Es decir, el PIB caerá a un ritmo interanual del 4% hasta finales de año, una cifra superior a lo que estima el Gobierno en su proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2010.
El cuadro macroeconómico de los PGE prevé que la economía nacional se contraerá un 3,6% interanual en 2009, mientras que apenas retrocederá un 0,3% en 2010. El problema es que, los últimos datos de los técnicos del Ministerio avanzan una caída del 4% hasta principios del próximo año, como mínimo. De hecho, para el primer trimestre de 2010, Economía prevé una contracción del PIB del 3,1% interanual.
De este modo, mucho tendría que mejorar la situación económica durante el segundo semestre de 2010 para que el PIB nacional apenas retroceda un 0,3% en el conjunto del próximo ejercicio, tal y como estima el Gobierno en los PGE. Por el momento, tanto los últimos datos de actividad económica como las previsiones del Ministerio no arrojan, al menos por el momento, una mejora de tales características.
No obstante, el PIB retrocedió un 4,2% en el segundo trimestre de 2009 y, por el momento, no hay visos de reactivación. De hecho, el sector manufacturero español aceleró su caída en septiembre y registró un descenso generalizado de la producción, las ventas y las exportaciones, según el Índice de Gestión de Compras de Markit (PMI) elaborado por Markit Economics.
Markit advierte de que el sector "muestra una lectura deprimente" debido a que "las empresas no pueden pasar a los clientes el aumento del coste de las materias primas" por la debilidad en la demanda.
El Índice, que tiene en cuenta factores como la producción, los pedidos y el empleo, descendió hasta los 45,8 puntos en septiembre y puso en evidencia "un marcado deterioro de las condiciones empresariales", además de que en 19 de los últimos 20 meses, la producción ha registrado una contracción.
Se trata de un dato relevante, puesto que el Índice de Gestión de Compras junto a la afiliación a la Seguridad Social, reflejan la evolución de la economía. En este sentido, cabe recordar que el pasado enero el PMI se situó en 31,5 puntos, su tercera cota más baja en la historia de este índice. El desplome del sector manufacturero reflejaba una caída del PIB próxima al 5% anual, tal y como avanzó entonces Libertad Digital. La caída del PIB, superior al 4% en el segundo trimestre, confirmó tal previsión.
Por último, en cuanto a la Seguridad Social cabe señalar que los últimos informes avanzan una destrucción de empleo superior al 6% durante los próximos meses.