LD (Europa Press) "Las condiciones de mercado y del crédito continuaron siendo difíciles en el primer trimestre. La presión se hizo notar especialmente en el aumento de nuestros costes de crédito. Sin embargo, Freddie Mac en su conjunto tuvo un mejor comportamiento que en el tercer y cuarto trimestre de 2007", afirmó Richard F. Syron, presidente y consejero delegado de la compañía.
La segunda mayor compañía del sector facturó 1.529 millones de dólares (990 millones de euros), más del doble que en el mismo periodo del año anterior al beneficiarse de la ampliación de los límites de suscripción fijados para las compañías hipotecarias esponsorizadas por el Gobierno de EEUU.
La firma radicada en McLean, Virginia, efectuó provisiones por créditos fallidos importe de 1.200 millones de dólares (777,5 millones de euros) durante los tres primeros meses del año, lo que refleja el incremento de las tasas de morosidad ante el descenso en la venta de viviendas y la caída de los precios.
No obstante, las cuentas de Freddie Mac se beneficiaron de un menor volumen de pérdidas por depreciaciones debido a la eliminación de determinadas garantías de crédito. Por otro lado, la capitalización de la compañía a 31 de marzo era de 38.000 millones de dólares, unos 6.000 millones por encima del límite del 20% fijado por el regulador del sector.
Además, Freddie Mac mostró su intención de captar unos 5.500 millones de dólares (3.563 millones de euros) en un "futuro próximo" mediante una o varias operaciones de venta de acciones comunes y títulos preferentes no convertibles "en un periodo en el que la mayoría de las fuentes de financiación del sector inmobiliario se han secado", indicó Syron.
El pasado 6 de mayo, la principal compañía de financiación y garantía hipotecaria de Estados Unidos, Fannie Mae, presentó pérdidas por importe neto de 2.186 millones de dólares (1.407 millones de euros) en el primer trimestre del año, frente al beneficio neto de 961 millones de dólares (619 millones de euros) del mismo periodo del año anterior y anunció una ampliación de capital de 4.500 millones de dólares (cerca de 2.900 millones de euros) para fortalecer su posición financiera.