LD (Europa Press) El Banco de España pone de manifiesto que la renta disponible de los españoles no se ve únicamente mermada por el imparable aumento de los precios de compra de las viviendas, sino que los españoles que optan por el alquiler también tienen que hacer un esfuerzo cada vez mayor para hacer frente a dicho pago. De hecho, en 2005 el precio del alquiler de vivienda aumentó un 4,3 por ciento, mientras que en 2004 este incremento se situó en el 4,1 por ciento. Este año, en apenas siete meses el precio para alquilar una vivienda ha repuntado ya un 4,5 por ciento, dos décimas más que al cierre del primer semestre del año.
A pesar del continuo encarecimiento de los alquiler, la política de vivienda defendida por el Gobierno pone especial énfasis en fomentar el alquiler como alternativa a la compra, dado que en España más del 80 por ciento de las viviendas ocupadas son propiedad de sus inquilinos. Por ello, el Ejecutivo aplicará el próximo año, aprovechando la entrada en vigor del nuevo IRPF, una exención total en este impuesto de las rentas inmobiliarias procedentes de alquileres a jóvenes menores de 35 años, con el objetivo de incrementar la oferta de pisos de alquiler destinados a ellos.
Sin embargo y pese a la presión de determinados sectores y partidos políticos, el Gobierno ha descartado introducir en el IRPF deducciones fiscales para el alquiler de vivienda, al considerar que estas políticas deben quedar en manos de las comunidades autónomas --hay regiones que en el tramo del impuesto cedido ya las aplican-- y que, además, tienen un efecto contrario al deseado, ya que favorecen un aumento de los precios de alquiler.