LD (EFE) Con esta operación, los dos empresarios se convierten en los máximos accionistas de Ence, justo por delante del presidente del grupo papelero, Juan Luis Arregui, que también ha aumentado su presencia desde el 13,822 al 14,854 por ciento del capital, según consta en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La mitad del paquete adquirido por Cortina y Alcocer fue comprada entre el 10 de agosto y el 20 de septiembre, cuando se hicieron con el 2,479 por ciento del capital.
Tras el aumento del 4,99 por ciento o 1,69 millones de títulos, comunicado este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNM), la participación de los dos empresarios asciende a 5,09 millones de acciones, con un valor de mercado de 193,4 millones de euros, de acuerdo con los 37,97 euros a los que terminó este jueves la cotización de Ence, tras subir el 4,46 por ciento.
Según las fuentes consultadas, el aumento de la presencia en Ence se debe a la confianza de los dos empresarios en el futuro del grupo empresarial ante la buena gestión del equipo liderado por Arregui. Los Albertos también han incrementado recientemente su participación en el grupo constructor ACS, donde sobrepasaron en septiembre el 12 por ciento del capital.
Los antiguos presidentes del Banco Zaragozano poseen 42,34 millones de títulos del grupo constructor, que el pasado martes desembarcó en Iberdrola con la compra del 6,31 por ciento del capital. Precisamente, Juan Luis Arregui es vicepresidente de la eléctrica, donde posee el 1,786 del capital, lo que le convierte en el primer accionista privado.
"Los Albertos" siguen sin entrar en la cárcel
Alberto Cortina y Alberto Alcocer fueron condenados por el Tribunal Supremo en marzo de 2003 por un delito de falsedad documental y estafa, al negociar la venta de Urbanor y obtener por su participación un precio que duplicaba el recibido por los socios minoritarios (entre ellos San Martín y Sentieri). Cortina y Alcocer actualmente están en libertad tras aceptar el Constitucional un recurso de amparo. Los magistrados del Supremo han mostrado su indignación con la actitud del TC.
"Los Albertos" –que tuvieron que abandonar la presidencia del Banco Zaragozano tras su condena– no han llegado a entrar en prisión en ningún momento, aunque sí han tenido que afrontar las consecuencias económicas de la condena, por valor de unos 48 millones de euros. El caso Urbanor data de 1987, cuando la sociedad del mismo nombre vendió los terrenos donde posteriormente se construyeron las Torres KIO en Madrid. La Audiencia Provincial de Madrid, que juzgó el caso en primera instancia, exculpó en enero de 2001 a los financieros al considerar que los delitos que se les imputaban habían prescrito, pese a considerar probados los mismos.