LD (M. Llamas) La evolución de la bolsa internacional muestra síntomas de mejoría desde el pasado mes de marzo. Sin embargo, lo que en principio comenzó en forma de crisis financiera desde mediados de 2007 se ha ido materializando progresivamente en la mayor recesión económica mundial desde la II Guerra Mundial.
Una contracción que, sin duda, golpea los ingresos de las empresas y de los trabajadores, más allá de las quiebras y el aumento del desempleo. Así, las empresas que componen el índice S&P 500, de referencia en EEUU y a nivel internacional, han registrado una caída de beneficios próxima al 90% en los últimos 20 meses, según los últimos datos correspondientes al primer trimestre de 2009.
Un desplome que carece de precedentes, al menos, desde que existen datos al respecto (1936). De hecho, dada la evolución a la baja de este indicador en los últimos meses, en el tercer trimestre del presente año, los ingresos de las compañías bursátiles que componen el S&P 500 registrará tasas interanuales negativas.
Fuente: Chart of the day
Este dato viene a confirmar otras tres referencias muy negativas en base a la evolución bursátil desde el estallido de la crisis del crédito, tal y como adelantó LD.
En primer lugar, la banca de EEUU perdió 26.000 millones de dólares en el último trimestre de 2008. Su beneficio anual cayó un 84% en 2008, el más bajo desde 1990. La bolsa de Wall Street ha caído a un ritmo no visto desde el crack del 29.
Por otro lado, algunos de los principales indicadores de actividad muestran que la actual crisis económica mundial supera, incluso, a la Gran Depresión de los años 30, tanto en intensidad como en rapidez. Por último, un informe de Deutsche Bank advertía recientemente de que el nivel de impago en los bonos corporativos superarán a los de la Gran Depresión.