L D (Agencias) El presidente de Airbus, Christian Streiff ha dimitido y ha sido reemplazado por Louis Gallois, quien conservará a la vez su cargo de copresidente ejecutivo de EADS, anunció el líder europeo de aeronáutica y defensa. El anuncio de los cambios al frente del constructor europeo de aviones y de la modificación de la estructura de la dirección de EADS figura en un breve comunicado, en el que el grupo subrayó el "apoyo unánime" de su consejo de administración al plan de ajuste "Power8", decidido el pasado día 3.
EADS también reafirmó su apoyo a la aplicación "inmediata" del plan de saneamiento del programa del avión gigante A380 de Airbus. Streiff, que había llegado a la presidencia de Airbus hace tres meses, presentó su dimisión la semana pasada, según medios franceses, por considerar que no tenía las manos libres para aplicar el plan de ajuste que había diseñado para afrontar la grave crisis de Airbus, provocada por los retrasos en las entregas del A380.
La dimisión de Streiff como presidente de Airbus y miembro del comité ejecutivo de EADS es efectiva "hoy mismo", indicó EADS en un comunicado a última hora de la tarde, después de las filtraciones periodísticas sobre los cambios en este momento de grave crisis en el grupo y en su filial de aviones.
Gallois sucede a Streiff con carácter "inmediato" y mantiene sus funciones de copresidente ejecutivo de EADS, junto al alemán Tom Enders, de quien pasarán a depender todos los directores de las divisiones de EADS (como helicópteros, espacio y defensa), con la excepción de Airbus. "La nueva estructura de dirección permitirá por una parte un gobierno más simple y eficaz y, por otra, nuevos ahorros de costes en el conjunto" de EADS, afirmó el grupo en la nota. Agregó que el consejo de administración tomará una decisión sobre el nuevo A350 "en las próximas semanas".
Se trata del tercer cambio en menos de dos años al frente de Airbus. Después de que Noel Forgeard tuviera las riendas del constructor europeo de aviones durante siete años, cedió su puesto a Gustav Humbert en 2005 y pasó a ocupar la copresidencia ejecutiva de EADS. Pero el pasado junio estalló la crisis con el anuncio de retrasos en las entregas del A380 y hubo una polémica por las plusvalías obtenidas por Forgeard y otros directivos mediante la venta de acciones u opciones sobre acciones de EADS semanas antes de que su cotización se desplomara en Bolsa.
En julio, Forgeard fue reemplazado por Gallois, mientras que Streiff sucedía a Humbert al frente de Airbus. El pasado día 3, EADS confirmó nuevos retrasos en las entregas del A380 –o sea, un retraso acumulado de dos años sobre el calendario inicial–, y avaló el plan de ajuste "Power8" presentado por Streiff, quien se había marcado un plazo de cuatro meses para presentar una reestructuración del mecano industrial de Airbus.
Según trascendió, entre otras medidas Streiff sugería concentrar la fabricación del A380 en Toulouse (suroeste de Francia) y confiar a la fábrica de Hamburgo (Alemania) el ensamblaje de la gama del A320. Los planes de Streiff suscitaron preocupación en Alemania por la fábrica de Hamburgo, donde 2.500 personas trabajan exclusivamente en el programa del A380. En contra de lo que se rumoreaba, EADS no ha esperado hasta la cumbre franco-alemana del próximo jueves en París para decidir los cambios al frente de Airbus.
El primer ministro francés, Dominique de Villepin, y el ministro de Finanzas, Thierry Breton, recibieron este lunes a Gallois para obtener información de primera mano "sobre la situación de EADS y Airbus", informaron fuentes gubernamentales galas. Villepin había considerado este domingo que no había "ninguna razón" para que Streiff dimitiera, un día después de que el ministro alemán de Defensa, Franz-Josef Jung, hubiera lanzado un mensaje para evitar que "las cosas vayan en la dirección de los franceses", interpretado como un ataque al presidente de Airbus.
Los accionistas alemanes de EADS, apoyados por su gobierno, se oponían a los planes de Streiff para la reorganización industrial de Airbus, y en particular a concentrar en Toulouse (sur de Francia) todo el trabajo de ensamblaje del A380. A cambio de la pérdida de esa actividad en Hamburgo, las instalaciones alemanas recibirían el ensamblaje de la totalidad de la gama de los aviones de un solo pasillo del constructor, la familia de los A320.
La dimisión de Streiff se había interpretado en un primer momento como una maniobra para exigir tener las manos libres a la hora de aplicar su plan y no tener que pasar continuamente por la estructura de mando de EADS, un procedimiento al que culpaba en parte de la crisis de Airbus. De confirmarse la llegada al frente de Airbus de Gallois, que seguiría siendo el copresidente de EADS, los socios franceses se mantendrían al mando del fabricante de aviones, pero su situación podría verse fragilizada a medio plazo.
Las divergencias entre accionistas franceses y alemanes de EADS, sobre fondo de grave crisis industrial pero también de gobernanza en Airbus, estarán con seguridad en la agenda de la cumbre franco-alemana del próximo jueves en París.
EADS también reafirmó su apoyo a la aplicación "inmediata" del plan de saneamiento del programa del avión gigante A380 de Airbus. Streiff, que había llegado a la presidencia de Airbus hace tres meses, presentó su dimisión la semana pasada, según medios franceses, por considerar que no tenía las manos libres para aplicar el plan de ajuste que había diseñado para afrontar la grave crisis de Airbus, provocada por los retrasos en las entregas del A380.
La dimisión de Streiff como presidente de Airbus y miembro del comité ejecutivo de EADS es efectiva "hoy mismo", indicó EADS en un comunicado a última hora de la tarde, después de las filtraciones periodísticas sobre los cambios en este momento de grave crisis en el grupo y en su filial de aviones.
Gallois sucede a Streiff con carácter "inmediato" y mantiene sus funciones de copresidente ejecutivo de EADS, junto al alemán Tom Enders, de quien pasarán a depender todos los directores de las divisiones de EADS (como helicópteros, espacio y defensa), con la excepción de Airbus. "La nueva estructura de dirección permitirá por una parte un gobierno más simple y eficaz y, por otra, nuevos ahorros de costes en el conjunto" de EADS, afirmó el grupo en la nota. Agregó que el consejo de administración tomará una decisión sobre el nuevo A350 "en las próximas semanas".
Se trata del tercer cambio en menos de dos años al frente de Airbus. Después de que Noel Forgeard tuviera las riendas del constructor europeo de aviones durante siete años, cedió su puesto a Gustav Humbert en 2005 y pasó a ocupar la copresidencia ejecutiva de EADS. Pero el pasado junio estalló la crisis con el anuncio de retrasos en las entregas del A380 y hubo una polémica por las plusvalías obtenidas por Forgeard y otros directivos mediante la venta de acciones u opciones sobre acciones de EADS semanas antes de que su cotización se desplomara en Bolsa.
En julio, Forgeard fue reemplazado por Gallois, mientras que Streiff sucedía a Humbert al frente de Airbus. El pasado día 3, EADS confirmó nuevos retrasos en las entregas del A380 –o sea, un retraso acumulado de dos años sobre el calendario inicial–, y avaló el plan de ajuste "Power8" presentado por Streiff, quien se había marcado un plazo de cuatro meses para presentar una reestructuración del mecano industrial de Airbus.
Según trascendió, entre otras medidas Streiff sugería concentrar la fabricación del A380 en Toulouse (suroeste de Francia) y confiar a la fábrica de Hamburgo (Alemania) el ensamblaje de la gama del A320. Los planes de Streiff suscitaron preocupación en Alemania por la fábrica de Hamburgo, donde 2.500 personas trabajan exclusivamente en el programa del A380. En contra de lo que se rumoreaba, EADS no ha esperado hasta la cumbre franco-alemana del próximo jueves en París para decidir los cambios al frente de Airbus.
El primer ministro francés, Dominique de Villepin, y el ministro de Finanzas, Thierry Breton, recibieron este lunes a Gallois para obtener información de primera mano "sobre la situación de EADS y Airbus", informaron fuentes gubernamentales galas. Villepin había considerado este domingo que no había "ninguna razón" para que Streiff dimitiera, un día después de que el ministro alemán de Defensa, Franz-Josef Jung, hubiera lanzado un mensaje para evitar que "las cosas vayan en la dirección de los franceses", interpretado como un ataque al presidente de Airbus.
Los accionistas alemanes de EADS, apoyados por su gobierno, se oponían a los planes de Streiff para la reorganización industrial de Airbus, y en particular a concentrar en Toulouse (sur de Francia) todo el trabajo de ensamblaje del A380. A cambio de la pérdida de esa actividad en Hamburgo, las instalaciones alemanas recibirían el ensamblaje de la totalidad de la gama de los aviones de un solo pasillo del constructor, la familia de los A320.
La dimisión de Streiff se había interpretado en un primer momento como una maniobra para exigir tener las manos libres a la hora de aplicar su plan y no tener que pasar continuamente por la estructura de mando de EADS, un procedimiento al que culpaba en parte de la crisis de Airbus. De confirmarse la llegada al frente de Airbus de Gallois, que seguiría siendo el copresidente de EADS, los socios franceses se mantendrían al mando del fabricante de aviones, pero su situación podría verse fragilizada a medio plazo.
Las divergencias entre accionistas franceses y alemanes de EADS, sobre fondo de grave crisis industrial pero también de gobernanza en Airbus, estarán con seguridad en la agenda de la cumbre franco-alemana del próximo jueves en París.