L D (Europa Press) En un mitin en Lugo para abrir la precampaña de las próximas elecciones autonómicas del 1 de marzo, Rajoy reivindicó la necesidad de discutir sobre la actuación situación económica en las Cortes porque allí es "donde están representados todos los españoles". En todo caso, afirmó que no le parece "mal" que Zapatero participe en el programa de la televisión pública aunque, en ese caso, defendió poder intervenir él también.
"Porque represento a diez millones de españoles que también quieren que se escuche su voz", proclamó como justificación y, a continuación, recriminó al presidente del Gobierno que haya "mentido y engañado" a los españoles sobre la situación económica, que ve "gravísima".
"Cada promesa que hace la desmiente la realidad al cabo de los meses", manifestó y, como ejemplo de ello, recordó que Zapatero vaticinó el pasado año crecimiento y una tasa de paro del 7 por ciento, frente a lo que situó la actual recesión de la economía y que España cuente con una tasa de parados que "dobla" la media de los países de la Unión Europea.
ZP hace "política de televisión"
En este contexto, Rajoy redujo la "receta" del Gobierno español a "gastar lo que no tiene" y "endeudarse" para ofrecer "planes para todos". "Cada vez que Zapatero da una rueda de prensa hay que echarse a temblar", ilustró, y adujo como explicación que siempre anuncia "más y más gasto público".
El líder de la oposición comparó este comportamiento con el de los españoles, que "están apretándose el cinturón", y, en consecuencia, acusó a Zapatero de estar "hipotecando" el futuro del país. Por ello, concluyó que el problema actual ya no es la crisis financiera internacional sino el propio Gobierno central, que, en su opinión, hace "política de televisión" y carece de una verdadera política económica.
"No se puede resolver la crisis con un presidente que tiene un optimismo mentiroso y gastando con la tarjeta de crédito de los españoles", reprochó, y agregó que "habrá que empezar a creer que esto del socialismo es incompatible con la creación del empleo" porque "más tarde o más temprano acaban volviendo al paro y al desempleo".
"Este es el signo y la identidad del PSOE", continuó, y añadió que "luego" llega el Partido Popular para "arreglarlo". De este modo, dio por demostrado que el PP es "capaz" de afrontar las dificultades económicas, como hizo en 1996 cuando se encontró una tasa de desempleo de más del 20 por ciento y un déficit público de 6 puntos porcentuales. Por todo ello, frente a la política del Ejecutivo actual, Rajoy se mostró convencido de que las cosas "se pueden hacer de otra forma". "Ya lo hicimos", sentenció, en referencia a los anteriores gobiernos dirigidos por el PP.