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Rajoy reprocha a Zapatero su papel en la UE: "De no ser por la foto ni se notaría su ausencia"

El líder del PP ha reprochado al presidente del Gobierno que sólo por las fotos se sabe que estuvo presente en la Cumbre de Bruselas, con lo que ha inaugurado un nuevo estilo de negociación, "el estilo Zapatero". Pese a que el presidente se ha mostrado "razonablemente satisfecho"  con la Cumbre porque "no hay vuelta atrás en Europa", Rajoy fue más breve: "nos ha ido mal; nadie se reunió con usted; nadie echó en falta su compañía". En definitiva, según Rajoy, "un chasco".

El líder del PP ha reprochado al presidente del Gobierno que sólo por las fotos se sabe que estuvo presente en la Cumbre de Bruselas, con lo que ha inaugurado un nuevo estilo de negociación, "el estilo Zapatero". Pese a que el presidente se ha mostrado "razonablemente satisfecho"  con la Cumbre porque "no hay vuelta atrás en Europa", Rajoy fue más breve: "nos ha ido mal; nadie se reunió con usted; nadie echó en falta su compañía". En definitiva, según Rajoy, "un chasco".
(Libertad Digital) Este miércoles el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, expuso en el Congresdo la postura defendida por España en la pasada cumbre del UE en la que se debatieron los presupuestos comunitarios 2007-2013 y los problemas tras el avance del NO al Tratado Europeo. No ofreció datos pero sí mucho optimismo. Mariano Rajoy le expuso su opinión basada en el peso nulo de España, lo que calificó como "el estilo Zapatero".
 
El líder del PP comenzó su intervención recordando que el propio Junker constató el "estrepitoso fracaso" de la Cumbre de la UE. "Comparto sus palabras", dijo. Según Rajoy, "cualquier comentario positivo está fuera de lugar, ha sido un chasco". Para el líder del PP "si no acertamos en el diagnóstico no encontraremos la solución". En estilo irónico, Rajoy le dijo al presidente que "nada de lo ocurrido en la Cumbre se debe a su responsabilidad... ni para bien ni para mal". De hecho, añadió, "de no ser por la foto ni se notaría su ausencia. No elevaré el tono, lo digo con toda cordialidad", matizó para aprovechar y lanzar un reproche transversal: "No quiero que el fiscal general del gobierno me atribuya actitudes vociferantes sospechosas".
 
Ya en materia, Rajoy dijo que "ni en los días previos a la Cumbre se apreció actividad por su parte, todos se movían y a usted no le llamó nadie. Nunca había ocurrido". El líder de la oposición relató cómo el resto de países, se una u otra manera, tuvo su cuota de actividad: "la cólera holandesa, la protesta alemana...". Sin embargo, lamentó, "ni una palabra del caso español, como si no hubiera caso español". "Nos lo ha tenido que contar usted", remachó. Rajoy reprochó a Zapatero que detrás del tan mencionado "diálogo y talante, nadie echó en falta su compañía". En este punto, lanzó otra acusación satírica. Dijo que la actuación del presidente sentará un precedente y la gente se referirá "al estilo zapatero" cuando quieran expresar que no se ha hecho nada.
 
Pero para basar el resto de sus críticas, Rajoy apunto que aunque "hay quien dice que le falta preparación y carácter, es usted el presidente del Gobierno y está obligado a defender los intereses de España".
 
Referéndum con prisas
 
La Cumbre, dijo Rajoy, "nos ha dejado un sabor de crisis total sobre el proyecto europeo, una crisis sin parangón". Respecto al Tratado Constitucional, apuntó: "A la Constitución la han dejado para el arrastre y usted se niega verlo. Nadie quiere menospreciar a los que la hemos votado", recordó pero explicó los movimientos de prórroga de muchos países. Para Rajoy, "el proceso de ratificación continúa sí, pero suspendido sine die; lo han dejado para que se oreé durante un año".
 
En este sentido recordó: "Su señoría tenía mucha prisa" para convocar el referéndum sobre la Constitución europea "como si fuera el padrino de la criatura". "Íbamos a ser los abanderados y nos hemos quedado solos con una bandera que no se sabe para qué sirve". No obstante sus críticas, el presidente del PP dejó claro que no se arrepiente de haber votado a favor del tratado y de haber pedido el voto "gracias a lo cual salió en España el referéndum adelante". "Votamos responsablemente en interés de España y Europa, las prisas las puso usted por pura vanidad", dijo Rajoy, que advirtió que lo que el PP no admitirá es la pérdida de peso de España en el sistema de voto europeo.
 
"Nos ha ido mal" en la negociación presupuestaria
 
El líder de la oposición dijo que en el Consejo Europeo ha fracasado también el acuerdo presupuestario y acusó a Zapatero de minimizarlo "como si temiera que le responsabilicemos". Rajoy destacó que el problema es que en Europa las circunstancias han cambiado y "no es posible hacer más Europa con menos dinero. Ha fracasado el diseño presupuestario y la idea de Europa está agotada".
 
"Nos ha ido mal a España. La cuestión era si usted tendría fuerza para evitar una debacle. No quiso usted llamar la atención ni mezclarse en disputas y al final se sumó al veto que plantearon otros", reprochó Rajoy. "Ustedes cultivan la resignación y las excusas, cobijan su ineficacia a la sombra de la resignación y con el aplazamiento se ha evitado usted un sofocón pero el resultado es malo para España".
 
Para el PP, en el esfuerzo para lograr un acuerdo de financiación, España debe "soportar una responsabilidad solidaria que le desborda . España está condenada a ser el peor perdedor" y lo achacó a que el "peso político de España en Europa ha caído en picado. "Usted se equivocó en sus alianzas, en aliarse con Chirac y Schroeder que al final votaron lo contrario de lo que votó usted".

“Usted no tiene quien le invite a tomar café

Casi al final de su discurso, Mariano Rajoy insistió en acusar a Zapatero de ser el culpable de la soledad internacional de España: “Usted no tiene quien le invite a tomar café”, aseguró el líder popular. Sobre esta idea, Rajoy manifestó que “será preciso revisar nuestras políticas de alianzas” porque “los españoles no podemos permitirnos ser perfectamente prescindibles”. El presidente del PP aseguró que a los líderes del eje francoalemán (Chirac y a Schroeder) “le tienen sin cuidado” lo que le pase al presidente español. Rajoy terminó diciendo que “ojalá podamos dejar de lado a personajes que solo piensan en disgregar esta nación” y manifestando “lo malo” que sería discutir “si somos una nación”.

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