Sonriente y tranquilo ha estado Rubalcaba en Valencia. Tocaba, como cada fin de semana, acto del PSOE y el vicepresidente y superministro vuelve a ser la estrella invitada.
Durante el primer tramo de su intervención ha estado, como es habitual en él, sonriente, jocoso y divertido. Le ha lanzado algunos piropos a Leire Pajín, que "lo hace muy bien" en los consejos de ministros, según dice. Además, ha señalado que "con Leire siempre me pasa lo mismo, me produce tranquilidad. Tiene treinta y pocos y pienso que este partido tiene asegurados otros 100 años de vida".
A continuación le dedicó algunas palabras al PP, a quien asemejó con los carteles que en París anuncian "paella madrileña", que es una "receta imposible", según su opinión. Algo así, como "escuchar a Cospedal preocupada, preocupadísima por el futuro de los trabajadores", ironizaba buscando la sonrisa del auditorio.
Después, continuó con lo que se ha convertido en rutinario los fines de semana: explicar las medidas de austeridad tomadas por el Gobierno. Según ha explicado, en esta ocasión, "la espiral de subidas de tipos de interés es la peor herencia que le podemos dejar a nuestros hijos", por este motivo "hemos tomado medidas" y tienen "reformar el mercado laboral" y las pensiones, entre otras cosas. Sobre el mercado laboral, pese a que compañeros de gobierno como, en su día, Celestino Corbacho, insistieran en que precisamente el problema de nuestro mercado laboral era demasiado flexible.
En este sentido, y ante los aplausos de un público entregado con él, Rubalcaba ha pedido que no le aplaudan por explicar los recortes: "No, no me aplaudáis los ejercicios de austeridad", ha dicho cariacontecido.
Rubalcaba ha realizado estas declaraciones durante su intervención en un acto celebrado en el Palacio de Congresos de Valencia para proclamar las candidaturas del secretario general del PSPV, Jorge Alarte, a la presidencia de la Generalitat, y de Joan Calabuig a la Alcaldía de Valencia.
Contrladores
Sobre la crisis de los controladores, el vicepresidente primero del Gobierno y ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha asegurado este domingo que si el presidente del PP, Mariano Rajoy, estuviera al frente del Ejecutivo central, los controladores aéreos "cobrarían más y trabajarían menos".
El ministro ha preguntado a Rajoy "¿qué habría hecho?", si hubiera estado al frente del Gobierno durante el pasado fin de semana, donde la ausencia de los controladores aéreos de sus puestos de trabajo provocó que centenares de personas no pudieran coger un avión en el puente de la Constitución.
Alfredo Pérez Rubalcaba ha explicado que en los últimos 30 años España ha vivido en "tensión permanente" por las protestas de los controladores que "nos amargaban las vacaciones". Asimismo, ha asegurado que en 1999 el Gobierno, encabezado por José María Aznar, firmó un convenio por el que "aumentaron los salarios y bajaron las horas de trabajo" de este colectivo.
Por ello, se ha mostrado convencido de que el PP volvería a apostar por "aumentarles los privilegios" actuales. "Con Rajoy tendríamos controladores ganando más y trabajando menos", ha manifestado Rubalcaba, quien ha indicado al líder 'popular': "No es un problema de talante, sino de principios".