LD (Europa Press) Según explicaron fuentes de la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-CSIF), este porcentaje corresponde a la previsión de inflación del Ejecutivo (2 por ciento) y a la inclusión de otro 20 por ciento del complemento de destino en las pagas extras, lo que se traduciría en un aumento salarial adicional del 0,7 por ciento. Con este incremento, el complemento de destino en las pagas extras alcanzaría el 80 por ciento.
Además, aunque en este caso sólo sería de aplicación a la Administración General del Estado (AGE), el Ejecutivo ha planteado a los sindicatos presentes en la mesa de negociación destinar el 0,5 por ciento de la masa salarial al fondo de pensiones, más un 0,3 por ciento para fondos adicionales. De esta forma, el salario de los empleados públicos adscritos a la Administración General del Estado podría elevarse el próximo año un 3,5 por ciento, aunque hay que tener en cuenta que lo destinado al fondo de pensiones es, en realidad, una retribución diferida.
Desde CSI-CSIF se está de acuerdo en separar en dos fases los aspectos retributivos (los relacionados con todas las Administraciones Públicas y los referidos al Estado), aunque confían en que el Gobierno mejore esta propuesta inicial, para superar la oferta retributiva de 2005 (que fue del 3,5 por ciento). El sindicato recuerda que el Ejecutivo reconoció expresamente en la declaración para el diálogo social en las administraciones públicas que los funcionarios habían perdido poder adquisitivo en los últimos años, comprometiéndose a buscar fórmulas que permitiesen recuperar poder de compra.