La consejera de Enseñanza de la Generalidad, Irene Rigau, ha considerado este martes que la Guardia Urbana debería haber notificado el absentismo escolar que tuvo lugar durante la mañana previa a la actuación del cantante Justin Bieber el 6 de abril, en la que miles de jóvenes, muchas acompañadas por sus padres, se saltaron las clases para hacer cola ante el Palau Sant Jordi.
"Creo que la Guardia Urbana es la que debe velar por el absentismo escolar, debería haber notificado quién había", ha dicho Rigau en una entrevista a Rac 1 recogida por Europa Press.
En este sentido, la consejera ha tachado de "escándalo" que los niños hagan cola en horas de clase para asistir al concierto de Bieber, y ha recordado que una de las funciones que tiene la Urbana cuando ve a niños en la calle fuera de horas de clase es notificar el absentismo, incluso llegando a multar.
Rigau ha criticado que se debata la supresión de la sexta hora -"cuando no era ni una hora lectiva"-, y que en cambio nadie se escandalice por perder cinco horas lectivas, por lo que ha sentenciado: "Creo que es una mala forma de educar".
"La madre que quiera hacer cola por las hijas es una madre que se está comportando como una amiga", ha criticado Rigau, que ha remarcado que las administraciones locales y la misma Guardia Urbana deberían levantar acta y multar también a las familias, ya que éstas tienen la obligación de llevar a sus hijos al colegio.
Recordando sanciones de 25 pesetas a familias absentistas en su época, Rigau ha criticado a "estos señores tan felices que se piensan que los padres, las madres y los hijos son colegas abdicando de su posición educadora".