La gogó y cantante, que ha ganado popularidad tras su paso por el programa, ha llamado al programa Sálvame para explicar que se encuentra "bastante mal" y aclarar que le van a quitar la vesícula y no el bazo. Tiene, contó, piedras "y una pancreatitis" y está a la espera de que supere la anemia que sufre para poder ser intervenida.
Monroy descartó que estuviera ingresada por el disgusto que le supuso ser eliminada –rompió a llorar y se tiró al suelo ante las cámaras- y afirmó sentirse "feliz" del apoyo que está recibiendo. Para demostrarlo, ha subido fotos a Twitter y ha lanzado un mensaje a sus fans: "No os preocupeis, me voy a poner bien".