En la pasarela no solo marcan tendencia los patrones de los diseñadores, sino que los rostros de las modelos permiten adivinar que el próximo invierno los cabellos con la raya marcada y las pieles llenas de luz serán patrones de belleza.
Para cerrar la segunda jornada de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid, Lemoniez ha sido claro y directo. Con un desfile inusualmente corto y rápido, la pasarela se despide hasta el próximo diseñador: Teresa Helbig.
Abrigos abotonados de línea mao y túnicas bolcheviques no dan lugar a siluetas marcadas. Sino todo lo contrario. Se trata de alcanzar "una mujer inmersa en la versatilidad de una cultura por la libertad y la diversidad".
La feminidad estalla en las faldas tubo de looks total black con detalles de cadenitas doradas mientras que el estilo masculino viene de la mano de los pantalones de pata ancha. En primer lugar, Lemoniez ha lanzado a la palestra modelos que combinan el marrón chocolate con medias rojas.
Los maxibolsillos ribeteados y abrigos con detalles de oro en cuello y puños han representado la parte elegante de la colección. Hasta que Lemoniez ha sacado los estampados geométricos llenos de color: rojo, turquesa, marrón y blanco.
Además, también ha habido un hueco para las reminiscencias marineras con un vestido de rayas horizontales. Cero escotes en Lemoniez, donde todo estaba bien cerradito.
En cuanto a los complementos, gorros de lana, cuellos de visón en varios colores, medias tupidas y cómodos peeptoes de tacón cuadrado.
Peinados marcados, pieles luminosas
Desde la primera jornada lo anunciaron las chicas de Duyos, las rayas perfectas marcan el camino a seguir en los peinados, y las de Roberto Torretta lo han reafirmado. En estas últimas aparecen conjuntadas con el otro valor en alza: el cabello todo liso, aunque algunos como Francis Montesinos se resistan a abandonar las ondas.
También los recogidos tienen su lugar para la próxima temporada, pero las fórmulas clásicas como las moños italianos de Juanjo Oliva o las trenzas de Vittorio&Lucchino se refrescan "gracias al juego con las texturas o a situarlos de manera asimétrica a un lado de la cabeza" señala a Efe Beatriz Matallana, directora de peluquería de la pasarela madrileña.
En cuanto al maquillaje, desaparecen los looks naturales y se opta por dar luz a la tez gracias a productos como la madreperla, comenta la jefa de maquillaje de Mercedes-Benz Madrid Fashion Week, Yolanda López, a Efe.
También se olvidan los tonos metálicos, a excepción del oro, como se han podido ver en Jesús del Pozo, cuyo "homenaje al dorado" se extendía a las diademas de lentejuelas.
Al centrarse en los labios, López escoge tonos procedentes de las rosas, "desde el té hasta llegar al rojo bizantino" y con un particular efecto mordido visto en Ailanto.
Entre las novedades, utilizar barras de labios que se adecúen a la temperatura de la piel de la mujer y así crear los tonos más adecuados para cada una.
En los ojos, la apuesta siguen siendo los difuminados en colores topo y el retorno de las rayas XXL como las que decoraban a las modelos de Roberto Verino. Mientras, los huesos faciales se marcan en forma de herradura o de ele.