Según ha podido saber Daily Mail, la ex de Asthon Kutcher ha ingresado en un centro de rehabilitación en Utah, al oeste de los Estados Unidos. No se sabe cuánto durará el tratamiento, pero el régimen en el que está ingresada es de completo aislamiento, por el que se pagan 1.200 euros por noche de internamiento.
El centro, en el que en su día estuvo también Lindsay Lohan y Eva Mendes, está especializado en el trato personal con estrellas hollywoodienses.
Parece que Demi Moore ha buscado ayuda médica tras su hospitalización el pasado 23 de enero. Y es que los problemas con el alcohol, las drogas y la alimentación han hecho que la actriz se tome en serio su salud. Demi está totalmente aislada y se sabe que solo puede tener contacto con un pequeño círculo de personas, mientras trata sus problemas alimenticios y de adicciones.
La actriz no está pasando su mejor momento desde que finalizase su matrimonio con Asthon Kutcher, pero tanto su ex como el padre de sus hijas han querido mostrar todo su apoyo a Moore para su pronta recuperación. "Ashton quiere que Demi sepa que él estará ahí apoyándola para todo lo que necesite", asegura una fuente cercana a la publicación.
Bruce Willis, por su parte, ha tenido mucho que ver con su ingreso ya que siempre ha apoyado a la actriz para que se trate de sus adicciones. "Willis está muy preocupado por ella", confiesan.