Según La Otra Crónica de El Mundo, Froilán, como se conoce popularmente a Felipe Juan, el hijo mayor de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, estuvo a punto de no volver al internado inglés donde estudia para aprender inglés y disciplina. Dicen que aunque se dio por hecho que sí, cuando le enviaron a Inglaterra no estaba claro que permaneciese allí el curso escolar entero. De hecho, tendría plaza reservada para incorporarse al centro donde estudiaba en España si después de un trimestre no se aclimataba al internado.
Pero según las fuentes de El Mundo, el niño "es muy feliz" allí y se habría adaptado al nuevo entorno perfectamente. Por ello, Froilán ha vuelto a Inglaterra. Al parecer, la Reina también ha tenido mucho que ver en esta decisión, que no era compartida por la Infanta Elena. El diario cita una frase literal que habría dicho doña Sofía: "No hay que dejar las cosas a medias y tres meses no sirven para nada".
Quizás también haya pesado en la decisión la presión mediática. El niño se ha convertido en la estrella de estas navidades, en especial con esa imagen de cazador de caramelos en la cabalgata, paraguas en mano. Según el diario, a quien más molesta el protagonismo de los pequeños es a Jaime de Marichalar, que no soporta el acoso de la prensa. El diario entrecomilla algunas de sus frases y recoge que, incluso, llegó a liarse "a bastonazos" contra algunos paparazzi: "Estoy dispuesto a poner querellas sin parar porque esto es intolerable. Alguien ha decidido que somos públicos y ni yo ni mi ex mujer recibimos un euro del Estado y los sé bien porque soy el que paga las facturas". Se declara "muy harto" de la prensa.
A ese hartazgo puede haber colaborado la rumorología que ha acompañado a la familia en estos días con el idilio atribuido a la Infanta Elena con su jefe en Mapfre, desmentido por la Casa Real y que habría molestado mucho en Zarzuela.