"Se fue demasiado pronto. Ojalá hubiera muerto yo", dijo entre lágrimas Jermaine desde el rancho de Neverland, donde explicó al canal NBC cómo fueron los duros momentos que pasó al conocer la muerte de su hermano, cómo se despidió de él con un beso en la frente y cómo se mantuvo al lado de sus tres sobrinos mientras éstos veían el cuerpo sin vida de su padre.
Jermaine, que hace una semana fue el encargado de confirmar la muerte de Jacko ante los medios de comunicación en Los Ángeles, aseguró que la familia Jackson ha perdido "a un hermano, a un héroe" y agradeció que todo el mundo esté llorando la muerte de Michael.
"El mundo está de luto. Nosotros estamos de luto. Sus seguidores están de luto. Es algo irreal, increíble", aseguró el ex miembro de los Jackson Five, quien explicó que lo más duro fue recibir la noticia de la muerte de su hermano por boca de su madre, "algo que nadie se puede imaginar".
Jermaine explicó que fue "muy emotivo" ver el cuerpo "sin vida y sin aliento" de Michael en el hospital, pero que fue capaz de no derrumbarse en ese momento al recordar que su hermano está "muy vivo en espíritu" y que su cuerpo era "simplemente un caparazón".
"Lo besé en la frente, lo abracé, lo toqué y le dije 'Michael, nunca te abandonaré y tú nunca me dejarás'", explicó Jermaine, quien también aseguró que un psicólogo del hospital recomendó que sus sobrinos Prince Michael, Paris Michael y Prince Michael II vieran el cuerpo del cantante para poder superar su pérdida.
Jermaine insistió en que su hermano, al que describió "como un regalo de Alá", se encontraba en un buen estado de salud para enfrentarse a los cincuenta conciertos que había planeado comenzar por Londres. "Creo y estoy convencido de que Michael era muy fuerte mental y físicamente. Era un bailarín, nunca dejó de bailar, y estaba preparado físicamente (para los conciertos)", aseguró.
El hermano de Michael Jackson aseguró que su madre Katherine está preparada para hacerse cargo de la custodia de los tres hijos del fallecido cantante y dijo que le gustaría que Neverland fuera el lugar donde "el rey del pop" fuera enterrado. "Siento la presencia de Michael aquí", dijo Jackson sobre el rancho en el que, en un principio, se iba a celebrar un funeral que fue cancelado el miércoles por la familia.
El público sigue esperando para saber ahora los planes que la familia tiene para la celebración de una ceremonia que, según la prensa, podría tener lugar en el pabellón Staples Center, de Los Ángeles.
Entre tanto, los homenajes públicos al cantante no han cesado en varios puntos de Estados Unidos, entre los que destaca el que esta semana le brinda el Apollo Theater de Nueva York, escenario que catapultó la carrera de Jackson a finales de los 60 como vocalista principal de los Jackson Five. Ese teatro, además de abrir sus puertas a miles de fans para disfrutar de los éxitos de Jackson, dedicó el miércoles su noche de los aficionados al "rey del pop" y decenas de sus seguidores probaron su talento musical realizando imitaciones de la estrella.