Dios quiera que sea algo pasajero. El martes lo ví en Zaragoza y me hizo llorar. Impresionante tanto su música como sus letras. Y su voz... se cuela muy adentro.
Madre mía, ojalá se recupere. Esuno de los grandes de VERDAD...no como los zejateros que han ido a La Habana a rendirle pleitesía al tiranosauro...
Qué maravilloso cantante y autor. No sé como le dejan entrar a España, siendo judio.