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Up de Pixar: Poesía y entretenimiento en la aventura del verano

Pixar vuelve a demostrar su poderío. Mientras otros tratan de sacar músculo en aspectos técnicos (Monstruos contra Alienígenas) o con historias convencionales (Ice Age 3), Up arrebata silenciosamente el podio a todos ellos con comodidad. Una de las mejores películas del año, y no sólo de animación.

Pixar vuelve a demostrar su poderío. Mientras otros tratan de sacar músculo en aspectos técnicos (Monstruos contra Alienígenas) o con historias convencionales (Ice Age 3), Up arrebata silenciosamente el podio a todos ellos con comodidad. Una de las mejores películas del año, y no sólo de animación.

Y es que Up destaca por ser no sólo un film familiar. Enérgica, sentimental, poética y definitivamente divertida, el film comienza con un demoledor prólogo, casi histórico en el cine de animación Disney, en el que se narra la vida conyugal de nuestro protagonista desde que conoce a su esposa hasta que la pierde de muerte natural. Lo que sigue a continuación es un viaje que se escribe en caracteres épicos y a la vez íntimos, repleto de autenticidad emocional –son dibujos más verdaderos que el cine de acción real- y que abarca risas, lágrimas y aventura.

Pocos films este año aportan un mensaje tan luminoso y optimista como Up, a pesar de obligar a la audiencia a enfrentarse, desde el comienzo, a la inevitable pérdida del ser amado. Es sólo una de las maravillosas ambigüedades del film de Pixar Animation, magistral espectáculo que respira complejidad y mensaje, y que lejos de presentar una moraleja  difusa, lo convierte todo en un precioso y sencillo juego de palabras.

Por un lado, el film utiliza los resortes del género de la fantasía y la aventura extrema –brillante paradoja: el protagonista es un octogenario enfurruñado- para concluir con una sonora alabanza a la vida sencilla y cotidiana. Y pese introducir la evidencia de la muerte, apuesta por mirar siempre al futuro y por un mensaje optimista ante dicha certeza –repito: el protagonista es un anciano nostálgico-. Además, y esto es lo importante, nos presenta una de las mejores historias de amor vistas en el cine de este año, pese a que uno de los protagonistas sea un difunto –la forma de sugerir la presencia constante del personaje de la desaparecida Ellie es, simplemente, de aplauso-. Es, simplemente, la mejor exaltación del amor familiar que se ha visto recientemente.

Y todo ello lo logra sin aspamientos o pretensiones, con un guión calculado y medido hasta la extenuación, y que no renuncia a hacer pasar a un público de 0 a 100 años el mejor rato del verano. Porque Up funciona como una estupenda comedia de aventuras, con personajes y gags memorables –todo lo relacionado con los perros y el pájaro protagonista causan sonoras carcajadas- y personajes diseñados e interpretados con elegancia y gracia. No se la pierdan.

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