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López Aguilar cree que el PSOE pasa por su peor situación en 35 años

Comienzan a multiplicarse las voces críticas en el partido después de que el PSOE haya vuelto a tocar fondo. 

El jefe de los socialistas españoles en el Parlamento Europeo, Juan Fernando López Aguilar, ha sido uno de los primeros dirigentes socialistas en referirise, en tono de autocrítica, al nuevo desastre electoral vivido por el PSOE. Tras apuntar que él no se suma a los que piden la dimisión del secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, porque cree que no es momento de "giros dramáticos", ni de "titulares impactantes o socialismo de Twitter", -la exministra Trujillo lo pidió este domingo a través de esta red social- sino de poner la "luz larga" y de hacer un socialismo "de pensamiento sólido", de que los socialistas sean capaces de reafirmarse en sus valores y en su compromiso contra la desigualdad.

En declaraciones antes de participar en la reunión de la Ejecutivo federal, el exministro de Justicia ha indicado que cree que el PSOE está pasando "una situación muy grave", seguramente "la peor" en 35 años, y ha llamado a los socialistas a reconocerlo ante los españoles. Es más, cree que los españoles, aunque estén preocupados sobre todo por la crisis, no reprocharían al PSOE que dedique "un tiempo" a mejorar su "capacidad de ser útiles".

En ese sentido, ha advertido de que el problema es que los españoles "no reconocen ya al partido socialista como alternativa y como herramienta eficiente" para cambiar las políticas de la derecha", y eso "es una responsabilidad de los socialistas", ha remachado.

"Tenemos que movilizar nuestros mejores recursos, nuestras mejores energías, tenemos que tener a los mejores, recuperar prestigio de antaño, crecer en militancia, ser capaces de refrescar nuestra imagen y sobre todo nuestro mensaje y, sobre todo, ser capaces de reafirmar nuestro compromiso firme con las ideas que nos definen: una idea clara de España", ha manifestado.

Para el exministro, el secesionismo creciente de los nacionalistas está "tensionando" lo que une a los españoles pero al mismo tiempo está siendo una "cortina de humo" para tapar los problemas reales, pero España no saldrá de la crisis "enfrentando a los que gritan 'visca el Barça' con los que gritan 'viva España'" ni "saltando de un barco que algunos piensan que va a la deriva".

De la crisis se saldrá por la izquierda, ha incidido, y para eso "hace falta el PSOE y ese PSOE tiene que tener una idea clara de lo que quiere para Europa y lo que quiere para España". Y también debe "poner en hora su compromiso de lucha contra la desigualdad" que está aumentando a causa de la crisis.

Y por último, ha pedido al PSOE que traduzca sus ideas y propuestas en actitudes. "Si decimos que somos el partido que más se parece a España, los españoles quieren que nos parezcamos a una sociedad que está sufriendo y nosotros estamos sufriendo con ella pero al mismo tiempo que seamos capaces de practicar lo que predicamos y de parecernos a lo que decimos". "Tenemos que volver a recuperar la capacidad de generar crédito y afecto. Hay millones de españoles que lo están pasando fatal, y nosotros con ellos", ha concluido.

El mensaje de Gómez

Otro de los socialistas destacados que ha hablado este lunes ha sido uno de los dirigentes más críticos con Rubalcaba, el presidente del PSM. En declaraciones a los medios, ha dicho que en este día quería mostrar su "afecto" a compañeros que están "en un estado de ánimo que no es el mejor".

Tras enviarles su "cariño" y "solidaridad", ha añadido que "a partir de mañana" el partido tendrá que emprender "una reflexión profunda y seria porque tendrá que haber cambios profundos y serios". 

Vara pide "sacar conclusiones"

 

También ha hablado de lo ocurrido el secretario general del PSOE de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, que considera que el PSOE en estos momentos, "más que dimisiones", lo que necesita es "escuchar los mensajes de la gente".

Según ha dicho, Feijóo ha ganado las elecciones "con 150.000 votos menos y 70.000 parados más", por lo que ha abogado por "sacar conclusiones" ante este hecho. "O hemos hecho un discurso distinto al que la gente está esperando o sencillamente una parte de la ciudadanía todavía no ha sido capaz de recobrar la confianza en nosotros", ha apuntado.

Así ha incidido en la idea en la que, como ha dicho, viene "insistiendo en los últimos tiempos" de que es "absolutamente imprescindible el reconocimiento de los errores cometidos", porque es el "mejor camino para poder defender los aciertos".

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