El ministro de Educación, José Ignacio Wert, ha comparecido en rueda de prensa tras la reunión de más de tres horas mantenida en su Ministerio con los consejeros autonómicos de Universidades.
Mientras el encuentro de la Conferencia Sectorial se producía, en el Congreso se debatía su reprobación propuesta por el PSOE. Muchas han sido las críticas que se han sucedido contra el ministro por no asistir a este pleno, a quien se le acusaba de "desentenderse" de su deber de acudir a la Cámara Baja.
"He leído en algunos medios que me desentendía (de la reprobación), pues sí me he desentendido, pero han podido comprobar que estaba entendido en otras cuestiones", dijo a los periodistas. "Sinceramente me acusan de muy arrogante, pero mi arrogancia no me lleva a pensar que la ciudadanía esté preocupada por mi reprobación", contestó.
Wert insistió en el mensaje que trasladó ayer, lunes, sobre este tema. Para el responsable de Educación los motivos que presenta el PSOE en su reprobación son "falsos". Y es que, "estamos dialogando sin precedentes", recordó el ministro al término de la reunión. Precisamente este lunes también se reunió con los consejeros de todas las comunidades autónomas para debatir el anteproyecto de Ley de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). No es la primera vez que lo hace ni tampoco será la última: habrá otros tres encuentros más para tratar de llegar al mayor acuerdo posible.
"Para nadie es un plato de gusto que un grupo proponga su reprobación", reconoció el ministro, pero añadió que "la única aprobación y reprobación que me importan son las de los destinatarios de la reforma educativa", sostuvo. Y en tono burlón, al ser cuestionado sobre si iría a la votación que aún no se había producido, dijo: "Si me he perdido la parte divertida, que es aquella en la que se me insultaba, para qué voy a ir a la aburrida, que es la votación".
Preguntado qué tiene que decir a los que le tachan de "sectario, provocador o nostálgico" de la escuela del franquismo, Wert contestó irónico que "envidia la profundidad de pensamiento" que tienen los que le critican de esta manera, así como la "profundidad de conocimiento que tienen de su psique" y, entre risas, les animó a dar el salto a las editoriales: "Si alguien se anima, que escriba un libro sobre mi carácter".
"Estamos en un sistema constitucional; los ministros los nombra el presidente del Gobierno. Si él considera que no estoy haciendo lo que debo, que no se preocupe el PSOE que ya me cambiará", afirmó. "Llevo 16 horas dialogando sin parar. (La reprobación) ya se califica sola", sentenció.