El escritor Antonio Muñoz Molina ha recibido este domingo el Premio Jerusalén, el máximo galardón que otorga la Feria Internacional del Libro de Jerusalén. El premio reconoce la larga trayectoria literaria de Muñoz Molina y su labor en distintos géneros y temas.
"No puede haber un premio mejor para un escritor que el concedido por una feria internacional del libro. Es abrumador leer la lista de los ganadores y ver mi nombre en ella. Nunca me he visto entre tan distinguida compañía literaria", ha afirmado Muñoz Molina en el acto en el que ha recogido el premio, según recoge la prensa israelí.
La Feria, que este año celebra su 50º aniversario, premia con este galardón a los autores que mejor expresen y fomenten la idea de la "libertad del individuo en la sociedad". Cinco galardonados con este premio han conseguido después el Nobel de Literatura.
La prensa israelí destaca que, con sus libros, Muñoz Molina ha reflejado los cambios de gran calado que ha sufrido la sociedad española en la transición de la dictadura a la democracia y la traumatizada memoria colectiva. La feria, bianual, se celebra este año entre el 10 y el 15 de febrero en el Centro Internacional de Convenciones de Jerusalén e incluye numerosas tertulias entre autores israelíes y extranjeros, talleres y seminarios.
Diversas organizaciones propalestinas españolas y extranjeras habían instado a Muñoz Molina a rechazar este premio para no legitimar la ocupación de los territorios palestinos. La iniciativa más trascendente fue una carta abierta publicada a principios de este mes en la que autores y artistas como Stéphane Hessel, Pink Floyd, Roger Waters, Ken Loach, John Berger o Luis García Montero pedían a Muñoz Molina que no acudiera a recoger el premio.
Este galardón, dotado con 10.000 euros, está patrocinado por el Ayuntamiento de Jerusalén, que los autores de la carta califican de "cerebro e instrumento de la colonización ilegal de Jerusalén Este". Muñoz Molina, en respuesta a otras peticiones similares por parte de organizaciones españolas, contestó que iba a recoger el premio porque elegía estar "de parte de las personas y organizaciones israelíes que militan a favor de la paz en vez de boicotear un pueblo entero".