El mismo día en que declaró en la Audiencia Nacional para justificar su fortuna, de hasta 38 millones de euros, y decir que se debía a operaciones bursátiles y venta de cuadros, Luis Bárcenas decidió interponer una demanda contra el PP por despido improcedente.
Según informa El País, que cita fuentes jurídicas, el extesorero del PP afirma que trabajó para el partido como asesor desde marzo de 2010, en contra de la versión de Génova, y que fue dado de baja, sin su consentimiento, el pasado 31 de enero de este año. Hasta entonces, añade, cobraba 21.300,08 euros brutos, incluido el prorrateo de pagas extraordinarias.
El extesorero del PP considera improcedente esa baja "causada por la empresa", realizada sin su consentimiento, ni autorización, "toda vez que todavía hasta la fecha el que suscribe no ha tenido conocimiento de que la empresa haya prescindido" de sus servicios, "ni haya extinguido" su relación laboral con él. El Partido Popular ha asegurado, a través de portavoces autorizados, que espera a Bárcenas "en los tribunales".
Entrega el pasaporte
El protagonista de la noticia ha acudido este martes a la Audiencia Nacional para entregar su pasaporte, como le ordenó el juez Pablo Ruz tras escuchar su declaración. Los periodistas aprovecharon para preguntarle sobre la demanda, pero el extesorero no quiso hablar con la prensa.
Bárcenas, que entregó el pasaporte apenas una hora antes de que expirara el plazo de 24 horas que tenía para cumplir con esta obligación, ha llegado junto a su conductor en el mismo Citroën C5 negro en el que acudió este lunes a su declaración. Tras permanecer 15 minutos en las dependencias del Juzgado Central de Instrucción número 5, salió sin hacer declaraciones.