David Hernández, el nuevo presidente de NNGG en el País Vasco, de 23 años, cree que "idolatrar a los políticos no es sano". Eso sí, el líder de los jóvenes populares en esta región apunta que le gusta "lo que dice Jesús Eguiguren", presidente del PSE y uno de los más polémicos líderes vascos por su papel en el proceso de negociación con ETA. Pero, para que no quede ahí la cosa, el joven asegura que también sigue a "Woddy Allen y Chojín, un rapero que he escuchado mucho".
Éstas son las declaraciones más sorprendentes de la entrevista que El Correo publicaba este viernes con Hernández, un joven de 23 años que se está tomando "un año sabático" en los estudios mientras decide si lo suyo es el "derecho o la filosofía" y que asegura que le incomodan "las pintadas diarias en las paredes tanto como los aguiluchos".
Dice David Hernández que se metió en el PP "para luchar contra ETA, como muchos otros compañeros. Afiliarme al PP me pareció lo más rebelde que podía hacer en Euskadi". En este sentido, explica que el anuncio de ETA de que dejaba de matar le cogió en casa. "No hice nada, no reaccioné. Lo escuché y me fui a la cama con sentimientos encontrados. Pensé ‘al fin’ y ‘no ha podido ser así’". "Hemos vivido el fin de ETA como cualquiera de sus asesinatos. En casa. No entiendo que la gente salga a la calle a celebrar una victoria de la selección española y no por esto".
Al flamante dirigente juvenil del PP vasco le molestaron las declaraciones de Ana Botella sobre que las nuevas generaciones de los partidos políticos deberían desaparecer porque a esa edad tendría que dedicarse a estudiar. "Fueron unas declaraciones muy desafortunadas", dice, que no reflejan la realidad de una organización que te da "apertura de miras, tolerancia y empatía", algo que, según él, es fundamental para cualquier político.