Solidaritat per la Independència (SI), que se quedó en las pasadas elecciones autonómicas sin representación en el Parlamento de Cataluña, perdió este sábado la alcaldía de Gallifa (Barcelona), la única que tenía, tras una moción de censura del grupo municipal de CiU, que contó con el apoyo de un exconcejal de SI unido ahora a la federación.
Según informa Europa Press, CiU presentó la moción alegando que el alcalde saliente, Jordi Fornas, había desatendido las prioridades del municipio para centrarse en la política nacional. Tras un pleno al que acudieron decenas de personas -en un municipio de apenas 200 habitantes-, el líder de la federación, Mateu Comalrena, ha sido nombrado nuevo alcalde.
Esto desató la ira de los militantes de SI que, según e-Noticies, insultaron y amenazaron a Comalrena. Tanto este como el tránsfuga, Josep Gil, fueron perseguidos por una quincena de personas con esteladas y banderas de Solidaritat. Comalrena recibió gritos de "fascista" o "vendido". A Gil, por su parte, le acusaron de "chorizo" y "ladrón". "No te dejaremos vivir en el pueblo, hijo de puta", le advirtieron, además de tacharlo de "español de mierda". Ambos necesitaron protección policial de los Mossos.
Los concentrados en apoyo de Fornas han cantado también "Los segadores", mientras que el grito más repetido fue "con Convergencia no hay independencia". Los dirigentes de SI Alfons López Tena, Toni Strubell y Santiago Espot estaban presentes.