Unos padres de Úbeda han logrado recuperar la custodia de su hija de once años después de demostrar que las lesiones que tenía la niña en la piel no eran quemaduras de cigarrillos, sino lesiones como consecuencia de una dermatitis.
Según han explicado, el origen estuvo en la denuncia que interpuso un profesor de la niña al ver las heridas. La pequeña fue trasladada a un centro de salud sin saberlo sus padres y la pediatra hizo un diagnóstico equivocado.
Durante los meses que han estado separados, los padres se han sentido señalados por todo el pueblo e incluso han cerrado su negocio. "Nadie nos escuchaba", han lamentado en declaraciones recogidas por Atlas.
Han reclamado ante Bienestar Social de la Junta de Andalucía, pero esta se escuda en que actuaron retirando la custodia porque así lo pidió un juez como medida cautelar. La familia, en cualquier caso, denuncia que "no hay dinero que pague todo lo que han hecho".