La figura de Paquillo -así le llamó el que sacó su nombre a relucir en pleno interrogatorio de la juez Alaya y mediador de Uniter, José González Mata ahora en prisión-, se relaciona con Faescom 92, sociedad vinculada a Francisco García Martínez, nombre oficial de quien fue secretario general de Empleo y que recibió 450.000 euros tras pedir ayuda a Juan Márquez, el ex director general de Empleo que sustituyó a Francisco Javier Guerrero.
El dinero fue sacado del mismo fondo de reptiles del que habían salido las falsas prejubilaciones y comisiones de los ERE, demostrándose así que los usos y costumbres presuntamente ilegales desarrollados en la Consejería siguieron después de la marcha de Guerrero, al que la Junta acusa en exclusiva.
Paquillo mantuvo una entrevista con el director general de Trabajo de la Junta entre 2008 y 2010, Juan Márquez, para pedirle una ayuda para "pagar los salarios de los trabajadores y los gastos de la Seguridad Social". Según ABC, el sustituto de Francisco Javier Guerrero al frente del departamento que gestionaba las ayudas de los ERE dictó una resolución fechada el 6 de agosto de 2009 que concedía una ayuda excepcional de 450.000 euros a la empresa proveedora de Santana Motor. Faescom 92 se dedicaba a la limpieza y el mantenimiento de los edificios y naves de la factoría automovilística, propiedad de la Junta, que cerró sus puertas en febrero de 2011.
Así, el dinero teóricamente destinado a prejubilaciones se destinó a la financiación de los salarios de los trabajadores de Faescom 92 SL, una empresa instalada en el parque industrial de Santana en Linares –Jaén- al frente de la cual, en calidad de gerente y apoderado estaba el secretario general de Empleo de la Junta entre junio de 2000 y febrero de 2003, Francisco García Martínez, alias Paquillo. Poco después de la concesión de los 450.000 euros -90 millones de pesetas- Paquillo se convirtió en administrador único. Luego, según El Mundo, pidió otra ayuda del mismo importe que le fue denegada.
La situación, según Paquillo, era desesperada porque Santana iba cada vez peor a pesar del dineral que la Junta había enterrado en ella y, consecuentemente, al ser el principal cliente de Faescom 92 la facturación decayó y crecieron las pérdidas. Pero en lugar de proceder a la reestructuración y/o cierre de la empresa como hace la inmensa mayoría durante la crisis, solicitó una ayuda a la Agencia IDEA, que es la encargada de pagar los ERE. Idea se la negó. Por ello, se dirigió al exdirector de Empleo, Juan Márquez, que logró que IDEA abonase 337.500 euros, 75 por ciento de la ayuda, el 5 de octubre de 2009, pagándose el resto después de justiicar los gastos.
Márquez, poco antes, en noviembre de 2008, ya había concedido una ayuda de 440.000 euros al Ayuntamiento amigo de su pueblo, Guarromán –Jaén-, del que Paquillo era -y ha sido hasta hace mes y medio- concejal y teniente de alcalde, para modernizar unos invernaderos, con cargo a la famosa partida 31L. La ayuda, como en los diversos casos de la Sierra Norte sevillana, fue otorgada sin tener en cuenta los procedimientos regulares, esto es, de manera arbitraria por lo que ha sido declarada nula por el Consejo Consultivo de Andalucía. A pesar de la ayuda, Faescom 92 SL desapareció en 2011.
Zarrías y las ayudas a Jaén
Gaspar Zarrías es el factótum del PSOE en la provincia de Jaén desde tiempo inmemorial y al que José Luis Sanz, secretrio general del PP andaluz, llama "brazo ejecutor" de Manuel Chaves. Su figura sigue cobrando realce en el caso de los ERE, en este caso por las declaraciones de Juan Francisco Algarín, uno de los correos que entregaba los sobres de los ERE. Según sus declaraciones, dos veces que fue a entregar dinero en sobres a Juan Lanzas, este se encontraba en compañía de Gaspar Zarrías y muchas más, en presencia de José Antonio Viera, ambos consejeros del gobierno de Manuel Chaves.
El PP quiere saber
Tras estas revelaciones, el PP andaluz, por boca de su secretario general, José Luis Sanz, ha dicho que hay una cosa que está quedando cada día más clara y es que el diseño del reparto de los sobres se hacía en el Palacio de San Telmo, sede presidencial de la Junta de Andalucía, donde además de José Antonio Griñán y Manuel Chaves, ha tenido presencia muy activa el ex consejero de la Junta de Andalucía, Gaspar Zarrías.
Por ello, Sanz preguntaba a Griñán si además de los bares cercanos a la Junta y al Parlamento, los sobres se han repartido también en la calle San Vicente, donde se ubica la sede del PSOE andaluz, y el palacio de San Telmo.
El PP andaluz no tiene duda a estas alturas de la presencia del gobierno de la Junta de Andalucía en la trama corrupta de los ERE.