Tensión, nervios y caos en los pasillos del Senado donde se celebran los plenos veraniegos del mes de julio y donde los grupos han comenzado a gestar una auténtica ofensiva contra el Gobierno por el caso Bárcenas. A las 16:00 horas en punto comenzaba el pleno con la primera 'actuación' de la Izquierda Plural. Todos sus diputados, liderados por Cayo Lara y ataviados con la camisetas verdes de "Escuela pública para todos" se alzaron en sus escaños 'de prestado' con pancartas que pedían "Gobierno dimisión. Elecciones ya".
"Les llamo al orden por primera vez", alzó la voz el presidente de la Cámara, Jesús Posada, quien llegó incluso a hacer pregonar a Ignacio Gil Lázaro, miembro de la mesa, el articulado del reglamento de las Cortes que prohíbe tales actuaciones. Después de una puesta en escena chulesca de los diputados comunistas, mostrando con más énfasis las pancartas hacia la bancada popular, han abandonado el hemiciclo.
En los pasillos, su líder, Cayo Lara, no descartó firmar y apoyar la moción de censura anunciada este martes por Alfredo Pérez Rubalcaba, pero abogó por que "primero que la presente" porque se trata todavía de "un anuncio en condicional porque está condicionado a los resultados de la siguiente diputación permanente. Por tanto, hay que esperar". En un intento de minimizar a un PSOE que esta vez lidera la ofensiva, reivindico que "Nosotros fuimos los primeros que exigimos que comparezca el presidente del Gobierno. Y si no, que dimita".
Mientras, en los pasillos comenzaron las negociaciones del promotor de la iniciativa, Alfredo Pérez Rubalcaba, con los portavoces de UPyD, Rosa Díez y CIU, Josep Antoni Durán i Lleida. En sendas reuniones por separado, el líder del PSOE pulsó los ánimos de cara a presentar una moción de censura el 24 de julio por la tarde, justo el día en el que la diputación permanente del Congreso vetará la comparecencia de Mariano Rajoy en periodo veraniego.
Unos encuentros para los que cuenta con el beneplácito de la ex dirigente socialista, Rosa Díez, cuya propuesta es una acción conjunta de todos los grupos para "rescatar al parlamento del secuestro al que está sometido por el PP. Esto sí que es un chantaje al estado de derecho". Por ello, la portavoz de UPyD no le hizo feos a estampar su firma en la moción socialista: "Si se hace en solitario por un grupo pues nos parece menos bueno, pero el objetivo fundamental es que se rindan cuentas y eso lo habremos conseguido".
Menos respaldo tiene Rubalcaba del nacionalista catalán Durán i Lleida quien hoy confió en que Mariano Rajoy comparecerá este verano para evitar el coste político de la moción de censura. "Yo espero que comparezca por su propia voluntad. Entiendo que no quiera que le marquen la agenda desde fuera pero debe aclarar algunas acusaciones y yo espero que la moción sea innecesaria". Ahora bien, dejó claro que no estamapará su firma. "Nosotros no vamos a firmar ninguna moción de censura porque esta es instrumental. Todo el mundo sabe que no va a haber un Gobierno alternativo, ni se van a convocar elecciones". Y añadió que si llega a haber un candidato alternativo, decidirán si votan al candidato "en función de su programa y de lo que diga en materia económica y en relación a la consulta de Cataluña".
En el PNV el anuncio tampoco suscita entusiasmo. Los nacionalistas consideran que ése no es el camino, aunque aún no tienen decidido si apoyarán o rechazarán la moción si ésta finalmente se presenta.