El maquinista del tren que descarriló el pasado miércoles en Santiago de Compostela, Francisco José Garzón, pasará este domingo a disposición judicial acusado de homicidio por imprudencia. Según fuentes del Tribunal Superior de Galicia (TSJG), está previsto que el juez le tome declaración esta tarde.
Garzón fue dado de alta ayer y trasladado a la Comisaría, desde donde será trasladado ante el juez antes de se cumplan las 72 horas reglamentarias. Fuentes del TSJG han especificado que éstas se cumplen a las 19.40 horas, por lo que será antes de esa hora cuando se ponga al maquinista a disposición judicial.
No obstante, el juez instructor del caso ya se encuentra en el juzgado desde primera hora de la mañana trabajando en el caso. La comisión judicial encargada de la investigación prepara la instrucción de diligencias en el juzgado.
En concreto, el titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de Santiago, Luis Aláez, ha llegado pasadas las 9.45 horas al edificio, donde a esta hora prepara las diligencias. Fuentes jurídicas consultadas por Europa Press han ratificado que está previsto que el magistrado se centre en exclusiva en este caso para agilizar al máximo su instrucción, por lo que profesionales de refuerzo se harán cargo de los procedimientos en los que trabajaba hasta el momento.
Desde primera hora, también se encuentra en los juzgados el titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago, José Antonio Vázquez Taín, quien en la noche del pasado miércoles se desplazó al lugar del siniestro para reforzar y agilizar las labores de levantamiento de cadáveres, que se prolongaron durante toda la madrugada. De la comisión que trabaja ya en la sede judicial forma parte también el fiscal Antonio Roma, que llegó al edificio pasadas las 10.00 horas.
Adif y Gobierno señalan al maquinista
El presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Gonzalo Ferre, dijo que el maquinista tenía que haber empezado a frenar cuatro kilómetros antes de la zona del siniestro, y la ministra de Fomento, Ana Pastor, señaló ayer que los operarios ferroviarios deben cumplir la normativa de seguridad. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, indicó ayer durante su visita a la zona del siniestro que hay "indicios racionales" como para considerar que el maquinista tiene "una eventual responsabilidad en lo que ha sucedido".
No obstante, compañeros de Garzón han asegurado que el tramo en el que se produjo el accidente requiere un cambio "brusco" de velocidad, de 200 a 80 kilómetros por hora, sin que haya ningún sistema que obligue ni alerte del mismo. Además, en días anteriores pusieron en valor su experiencia y su fama de prudente.
Las 78 víctimas mortales del accidente han sido ya identificadas y en los hospitales gallegos siguen ingresados 71 heridos, 31 de ellos en situación crítica, según la última información facilitada por la Xunta de Galicia.