La Policía Nacional ha detenido a 17 personas acusadas de haber perpetrado uno de los mayores robos de joyería de la historia, con un botín superior a los 23 millones de euros. El robo se produjo el pasado 2012, cuando los ladrones se apoderaron de 1.700 relojes de prestigiosas marcas suizas en una empresa de alta relojería situada en el distrito de Ciudad Lineal, situado en Madrid capital. La investigación policial se ha prolongado durante casi once meses.
En la rueda de prensa dada en la mañana de este jueves, la Policía ha manifestado la importancia del esclarecimiento que ha conseguido recuperar hasta el momento más de 300 relojes de lujo, algunos de ellos valorados en 270.000 euros. Además, gracias a la colaboración de Interpol, Organización Internacional de Policía, se han logrado localizar más piezas en Shangai donde la organización estaba distribuyéndolas en el mercado ilegal. Entre los arrestos realizados en Madrid se encuentra un conocido alunicero de la milla de oro de Madrid, conocido como el "Troll", acusado de ser el autor intelectual del golpe.
En los registros, los agentes han intervenido armas de fuego, más de 45.000 euros en efectivo, diversas cantidades de droga, otras joyas y aparatos electrónicos, junto a las herramientas utilizadas para la comisión del robo, como equipos de lanza térmica y oxicorte.
Yates y chalets de lujo
El grupo de la organización residentes en España planificaba sus vacaciones en urbanizaciones de lujo de la costa ibicenca y del norte de Marruecos, llevando un alto nivel de vida alquilando todo tipo de embarcaciones de recreo y haciéndose pasar así por personas de alto poder adquisitivo.
Los investigadores esperaron a detener al grupo, cuando se tuvo localizados al resto de miembros de la organización internacional. Los más de 300 relojes incautados hasta el momento suman un total de 4 millones de euros.
Las investigación no ha concluido por lo que no se descartan nuevas detenciones y la recuperación del resto del botín. La operación ha sido posible gracias a la colaboración conjunta entre la Brigada Provincial de Policía Judicial, la INTERPOL, la Policía de China y Andorra.