El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, acusó este viernes al presidente de la Generalidad de Cataluña, Artur Mas, de "contaminar la convivencia" en la región con el desafío separatista que ha lanzado al Estado de Derecho, con referéndum ilegal incluido, lo que se estaría traduciendo en una "quiebra social y familiar" y que según el ministro se habría hecho aún más patente durante las celebraciones de estas Navidades.
"Lo que me duele de verdad es que lo que está haciendo es fracturar a la sociedad catalana a nivel familiar, entre compañeros de trabajo, entre grupos de amigos... Acabo de vivir situaciones muy tristes que jamás pensé que viviría en Cataluña", dijo, tras lo que explicó que había tenido conocimientos de familias o amigos que habían decidido no reunirse por las diferencias políticas existentes.
A preguntas de los periodistas, tras un rueda de prensa en la que hizo públicos los datos sobre seguridad vial en el año 2013, restó importancia a la carta de Artur Mas remitida en los últimos días a destacados líderes europeos para pedirles su apoyo para el referéndum independentista ilegal que quiere celebrar el próximo mes de noviembre.
A juicio de Jorge Fernández Díaz, esta carta tuvo una "respuesta por adelantado" por boca del presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, que dijo "claramente" que si una parte de un Estado miembro se separa "queda automáticamente excluido" de la Unión Europea "y debe ponerse en la cola si quiere volver a reingresar", siempre y cuando cumpla los requisitos que se exigen a los países para hacer este ingreso.
En la misma línea, añadió que también el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, respondió en el mismo sentido, e incluso aludió a la entrevista que Artur Mas concedió al diario italiano La Repubblica hace unos días, en la que reconocía que Cataluña saldría de la Unión Europea en caso de independizarse.