Nueva crisis en el socialismo catalán. A escasas horas de que se vote en el Parlamento catalán la solicitud del traspaso de la competencia para convocar referendos, varios diputados del PSC se han rebelado contra la decisión de Pere Navarro de votar en contra.
El diputado y alcalde de Lérida, Àngel Ros, dejará su escaño en el Parlament catalán por la negativa de la dirección del PSE a permitir la abstención. Ros anunciará su decisión a las 17:30 horas.
Además, Marina Geli , Joan Ignasi Elena y Núria Ventura ya han adelantado que romperán la disciplina de voto pese a la amenaza de ser expulsados del partido.
Las discrepancias en el partido no son nada nuevo en los últimos tiempos. Este miércoles, la novedad en el PSC es que por primera vez su primer secretario, Pere Navarro, se pone firme ante los díscolos. Tras confirmar la renuncia de Angel Ros, que "esta tarde anunciará que deja el escaño", y alabar su decisión porque es "un gesto que le honra", instó al resto de críticos a hacer lo mismo.
"Lo que todo el mundo tiene que hacer con su voto es seguir las indicaciones que el máximo órgano ha establecido democráticamente". Navarro insistió en que "nadie puede poner en duda el resultado de un procedimiento escrupulosamente de debate democrático dentro de la organización del partido, por parte de todos sus representantes".
El primer secretario del PSC se mantuvo firme en que el voto para la transferencia de referendos se fijó en un rotundo No en el último cónclave del partido. "Cuando uno está inmerso en ese proceso democrático, tiene que reconocer el resultado de una votación y actuar en función que se ha tomado".
Declaraciones de Navarro tras reunirse con Alfredo Pérez Rubalcaba en las dependencias del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados. Y para ello, puso el ejemplo de Angel Ros por "poner por encima de sus intereses nacionales el interés colectivo del partido".