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¿Qué ha sucedido con los condenados por el 11-M?

Los principales condenados Zougam, El Gnaoui y Suárez Trashorras continúan en prisión.

Diez años después de la masacre el 11-M, la mayoría de los condenados en firme por el Tribunal Supremo por los atentados de Madrid continúa a día de hoy en prisión. Las principales penas las recibieron Jamal Zougam y Otman El Gnaoui, -condenados a 42.922 y 42.924 años de prisión, respectivamente- que fueron considerados como autores de los atentados. Al primero de ellos como "autor material" ya que dos testigos dijeron haberlo visto en los trenes mientras que al segundo se le condenó por ser la persona que trasladó y guardó los explosivos de la masacre.

Ambos llevan diez años en prisión en régimen de primer grado. El primero de ellos se encuentra actualmente en la cárcel de Topas (Salamanca) y el segundo en la prisión de A Lama (Pontevedra). Abandonarán la cárcel en 2044 cuando lleven 40 años en la misma y no se podrán acoger a un régimen penitenciario flexible –tercer grado- hasta que haya cumplido 32 años efectivos de condena entre rejas.

La tercera condena más abultada se le impuso al exminero José Emilio Suárez Trashorras, que fue condenado a 34.715 años por sustraer los explosivos y suministrarlos a la célula que perpetró los atentados. El próximo 18 de marzo Trashorras cumplirá diez años en la prisión de El Dueso, en Santoña (Cantabria).

El exminero se encuentra en segundo grado penitenciario, aunque no se ha beneficiado de permisos pero sí acogido a la denominada 'Vía Nanclares' participando en encuentros con víctimas del terrorismo. Además, Suárez Trashorras se han convertido a la iglesia evangelista.

Por su parte, cuatro de los condenados ya han salido de prisión: Nasredi Bousbaa y Mahmoud Slimane (condenados a dos años por falsedad documental) y Antonio Iván Reis y Sergio Álvarez (condenados a tres años de prisión por tráfico de explosivos).

También se encuentra en libertad -pero vigilada- G.M.V alías 'El Gitanillo' condenado a seis años de internamiento en un centro de menores y a cinco de libertad vigilada por transportar parte de los explosivos empleados en la masacre de Madrid.

El próximo de los condenados del 11-M que saldrá de prisión será Rafa Zouhier condenado a diez años por tráfico de explosivos ya que la Audiencia Nacional lo consideró el enlace intermediario entre los terroristas y Trashorras. Actualmente, se encuentra en la cárcel de Puerto I, en Cádiz. Su licenciamiento definitivo de condena especifica que una vez que se puesto en libertad el próximo día 16 –tras pasar 3650 días encarcelado- será expulsado a Marruecos. No obstante, ha contraído matrimonio con una mujer española con el objetivo de permanecer en España.

Por su parte, el condenado Mohamed Larbi Ben Sellan permanece en estos momentos en prisión pendiente de su extradición a Marruecos aunque ya ha cumplido de forma íntegra su condena de nueve años de cárcel que finalizaba el pasado 8 de febrero. Ingresó en prisión en junio de 2005 después de que sus huellas apareciesen en el piso de Leganés. Fue condenado por el Tribunal Supremo por un delito de integración en organización terrorista.

Por último, Antonio Toro –condenado por suministrar los explosivos de los atentados- ya cumplió la pena de 4 años que le impuso el Alto Tribunal por el 11-M aunque actualmente sigue en la cárcel cumpliendo diversas condenas acumuladas que suman 18 años. Abandonará el centro penitenciario el 2022. Se encuentra en régimen de segundo grado y ha disfrutado de varios permisos penitenciarios.

Una década después de los atentados permanecen en prisión por distintos delitos los condenados por el Tribunal Supremo Hassal el Haski, Fouad el Morabit, Saed el Harrak, Mohamed Bouharrat, Youssef Belhadj, Rachid Aglif, Abdelmajid Bouchar y Hamid Ahmidan todos ellos en régimen de primer grado –sin permisos- excepto Bouharrat –en prisión desde el 21 de mayo de 2004-que ya ha accedido al segundo grado penitenciario aunque tampoco goza de ningún tipo de permisos.

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