El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez Vázquez, aseguró este miércoles que las muertes de los quince inmigrantes subsaharianos junto al espigón de la playa de El Tarajal el pasado 6 de febrero, tras un intento masivo de asalto al perímetro fronterizo de la ciudad autónoma de Ceuta, se produjeron antes de que los agentes de la Guardia Civil tomasen posiciones en la zona cercana al espigón.
"No hubo una relación de causa-efecto en el uso de material antidisturbios y la muerte de los inmigrantes subsaharianos", dijo durante su comparecencia en la comisión de Interior del Congreso de los Diputados, en la que es la tercera explicación oficial en la Cámara Baja de un alto representante del Ministerio del Interior sobre esta tragedia, después de la comparecencia en la misma comisión y una respuesta a una interpelación en el pleno, en ambos casos a cargo del ministro, Jorge Fernández Díaz.
El número dos de Interior afirmó que la tragedia "no pudo evitarse" y consideró que las muertes se produjeron por una suma de circunstancias, entre las que destacó el "error de cálculo por parte de los inmigrantes de la profundidad del agua", el "cansancio físico que acumulaban" por la prolongación del intento de entrada ilegal en la ciudad y que "el movimiento en masa que les favoreció en tierra fue muy perjudicial en el mar", sobre todo porque la mayoría de ellos "no sabía nadar".
Aseguró que "el uso de material antidisturbios no provocó escenas de pánico entre los inmigrantes" que estaban nadando y mantuvo que las pelotas de goma sólo se utilizaron para delimitar la frontera marítima entre ambos países y que en ningún caso los agentes del Módulo de Intervención Rápida (MIR) de los Grupos de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil dispararon cerca de los inmigrantes que estaban nadando.
"Los inmigrantes que fueron rechazaros -en alusión a los que llegaron a pisar la parte española de la playa- no sufrieron lesiones. Se utilizaron 145 pelotas de goma, lo que significa que cada agente utilizó apenas 3-4 pelotas de gomas en un incidente que se prolongó durante más de 30 minutos", dijo.
Tras exponer a los diputados de todos los partidos una exposición detallada del intento de violación del vallado fronterizo, apoyado con los vídeos grabados por las cámaras de seguridad y los audios de las comunicaciones que mantuvieron los agentes del Instituto Armado durante aquella jornada, solicitó un pacto de Estado en materia de inmigración, tal y como ha venido pidiendo el ministro del Interior durante las últimas semanas.